
En 2024 la ciencia médica logró avances revolucionarios que prometen transformar la salud global. Desde tratamientos innovadores hasta el impacto de la inteligencia artificial (IA), este año ha sido testigo de descubrimientos clave en áreas como la diabetes, el VIH, el Alzheimer, y el cáncer. Especialistas del British Medical Journal (BMJ) dan sus puntos de vista con los avances más relevantes para iniciar el 2025.
Los agonistas de los receptores GLP-1, como la semaglutida (Ozempic o Wegovy), han destacado no solo por favorecer la pérdida de peso, sino también por reducir riesgos cardiovasculares, insuficiencia renal y la severidad de la apnea del sueño. Estos avances posicionan a estos medicamentos como herramientas esenciales para mejorar la salud integral de los pacientes.
Un nuevo estudio ha demostrado que las inyecciones semestrales son más eficaces que la profilaxis oral diaria para prevenir el VIH. Este avance podría revolucionar la lucha contra el virus, especialmente en regiones con acceso limitado a tratamientos.
Un estudio sueco ha desarrollado un análisis de sangre con un 90% de precisión para diagnosticar el Alzheimer, eliminando la necesidad de pruebas invasivas como escáneres PET o muestras de líquido cefalorraquídeo. Este avance promete facilitar el diagnóstico temprano y mejorar la atención a los pacientes.
La inteligencia artificial ha ganado terreno en la detección y el tratamiento de enfermedades, destacando su capacidad para mejorar diagnósticos y personalizar terapias. En 2024, el Servicio Nacional de Salud británico (NHS) inició ensayos con vacunas personalizadas contra el cáncer, marcando un hito en la inmunoterapia y tratamientos específicos para el cáncer de mama y el linfoma de Hodgkin.
Los estudios sobre los efectos a largo plazo de la COVID-19 en jóvenes y el impacto de los alimentos ultraprocesados en la salud continúan siendo un foco de atención. Además, investigaciones han relacionado la contaminación atmosférica con la infertilidad, mientras que el cambio climático sigue ejerciendo presión sobre los sistemas sanitarios globales.
Los avances médicos de este año no solo ofrecen nuevas opciones terapéuticas, sino que también reflejan el compromiso continuo de la ciencia por mejorar la calidad de vida. Desde tratamientos personalizados hasta la integración de la IA, el futuro de la salud parece más prometedor que nunca. N