El Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad (Conadis), responsable de promover los derechos de este sector de la población, continúa enfrentando una situación crítica debido a la reducción constante de su presupuesto, la disminución de personal y la falta de liderazgo, ya que actualmente no cuenta con un director general.
Para 2025, los legisladores de Morena, el Partido del Trabajo y el Partido Verde aprobaron un nuevo recorte presupuestal, asignándole solo 35 millones 196 mil pesos, un 5 % menos que en 2024. Esto representa una caída significativa si se compara con los 73 millones 842 mil pesos que recibió en 2015, cuando tuvo su mayor financiamiento. Desde entonces, el deterioro financiero y operativo del Consejo ha sido evidente.
Creado en 2011 bajo la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad, el Conadis nació con la misión de coordinar políticas públicas en favor de esta población. Sin embargo, los recursos limitados y el personal reducido dificultan cada vez más su labor. En casi una década, pasó de tener 130 empleados en 2015 a solo 21 en 2024, según datos oficiales. Además, su incorporación a la Secretaría de Bienestar en 2013 ha acentuado su dependencia de esta dependencia gubernamental.
El deterioro del Conadis no es casualidad. Durante su gobierno, el expresidente Andrés Manuel López Obrador planteó convertirlo en una unidad administrativa de la Secretaría de Bienestar, lo que, según críticos, podría debilitar aún más su impacto. Aunque esta propuesta aún no ha sido discutida en la Cámara de Diputados, los recortes presupuestales y la falta de acciones para fortalecer la institución son una señal preocupante para los defensores de los derechos de las personas con discapacidad.
Organizaciones sociales y representantes de la oposición han señalado que el Conadis carece de la capacidad para cumplir su mandato, principalmente por la omisión de nombrar a un director general durante los seis años del gobierno de López Obrador. Esto refleja, según ellos, un abandono institucional de una población que enfrenta barreras significativas para acceder a servicios básicos, educación, empleo y una vida digna.
En México, más de seis millones de personas viven con algún tipo de discapacidad. Aunque programas como la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente han avanzado en el otorgamiento de apoyos económicos, especialistas advierten que esto no es suficiente para garantizar su plena inclusión en la sociedad. El debilitamiento del Conadis deja un vacío en la promoción de políticas públicas y en la defensa de los derechos de este grupo vulnerable.
El diputado Juan Armando Ruiz, representante de las personas con discapacidad, lamentó la falta de voluntad política para fortalecer al Conadis. Según él, esta institución nunca alcanzó su potencial desde su creación y ahora enfrenta un futuro incierto. “Es preocupante que un organismo creado para proteger derechos esté siendo relegado a un segundo plano, dejando sin voz ni respaldo a millones de personas”, señaló.
Diversas voces han pedido que, en lugar de desmantelar al Conadis, se invierta en su fortalecimiento. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha advertido que su desaparición representaría un grave retroceso en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Mientras tanto, el gobierno federal asegura que continuará trabajando en programas de apoyo para esta población, aunque las acciones concretas para garantizar su inclusión integral parecen cada vez más lejanas. N
Con información de Animal Político.
