Al menos 18 personas han perdido la vida debido a Beryl, un huracán que el martes ya se había convertido en ciclón subtropical. Ocho de las muertes ocurrieron en Estados Unidos (EUA) y diez durante su trayectoria por el Caribe; entre las víctimas destaca una mexicana, María de la Luz Loredo, quien perdió la vida luego de que Beryl derribara un enorme roble que cayó encima de su vivienda en Texas.
De acuerdo con medios internacionales, la mujer de 74 años, oriunda de Tamaulipas, se disponía a descender hacia la primera planta de su hogar cuando un árbol de 70 años de antigüedad se derrumbó sobre una de las paredes de la vivienda.
El árbol de gran tamaño cayó directamente en la habitación de María, según informó Univision. La casa se ubica en la zona de Spring, específicamente en la zona de Ponderosa Forest, hacia el norte de Houston, donde hay árboles de gran tamaño.
“Mi mamá apenas se acababa de levantar y estaba alistándose para venir abajo, de repente vi como un aire bien fuerte impactó a la casa de mi vecino y cerré la puerta, y cuando la cerré, se oyó como una explosión atrás. Se había caído el árbol. Fuimos a checar, abrí la puerta, y grité su nombre y no había cuarto ya”, contó José Loredo, residente de Houston e hijo de Luz Loredo.
María Loredo, madre y abuela, había emigrado a Texas hace varias décadas. Ahora su familia recauda fondos a través del sitio GoFundMe para costear el funeral de la mujer. Hasta el momento, llevan 6,065 dólares (108,157 pesos) de un total de 50,000 dólares (891,655 pesos, aproximadamente).
“El huracán Beryl no solo se llevó la vida de la señora Loredo, sino que también destruyó su hogar. Lo que puedan donar se destinará a su recuperación y a los gastos funerarios. Agradecemos cualquier ayuda que puedan brindar a la familia Loredo. Por favor, compartan esto. Gracias y que Dios los bendiga a todos”, se lee en la descripción de la donación. Jesse Espinosa y José Loredo son quienes organizan esta recaudación de fondos.
En el estado de Texas, EUA, donde Beryl entró como un huracán categoría 1 la madrugada del lunes, al menos siete personas fallecieron a causa de caída de árboles, un incendio ocasionado por un rayo e inundaciones.
Tres de las muertes ocurrieron en el condado de Montgomery, vecino de la ciudad de Houston, según reportaron la noche del lunes autoridades locales citadas por la prensa. Otras cuatro ya habían sido registradas en el área de Houston, una ciudad de 2.3 millones de habitantes que estuvo cerca de la trayectoria de Beryl.
El fenómeno climático, que tras azotar Texas tomó rumbo noreste en territorio estadounidense, causó una muerte más en la localidad de Benton, Luisiana, dijo una autoridad local. Estas ocho víctimas se suman a las otras diez que Beryl dejó la semana pasada durante su paso por el Caribe: tres en Granada, dos en San Vicente y las Granadinas, tres en Venezuela y dos en Jamaica.
La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) anunció que entregará 4.5 millones de dólares de ayuda humanitaria para San Vicente y las Granadinas, Jamaica y Granada.
Entre el lunes y el martes, más de 1,400 vuelos fueron cancelados en el Aeropuerto Intercontinental George Bush de Houston, según el portal FlightAware, en medio del mal tiempo que afectó a la zona.
Este martes, 1.86 millones de usuarios en Texas aún permanecían sin energía eléctrica, por daños en la transmisión eléctrica, según el sitio poweroutage.us. Otros 9,500 clientes tampoco contaban con el servicio en Luisiana, según la última actualización.
Mientras los equipos trabajaban para restablecer el servicio, varias ciudades instalaban refugios con aire acondicionado. Hace una semana, Beryl llegó a ser un potente huracán con vientos de 250 kilómetros por hora (km/h) que golpearon el Caribe. Luego se degradó a tormenta tropical el último viernes tras tocar tierra en la Riviera Maya de México, donde dejó daños materiales. Pero la noche del último domingo, en su trayectoria a Estados Unidos, volvió a tomar fuerza.
Beryl tocó tierra como huracán el lunes en la localidad costera de Matagorda, Texas, con vientos de 130 km/h, causando destrucción e inundaciones en algunos lugares del área. Tras azotar zonas cercanas a Houston, perdió fuerza mientras se internaba en territorio estadounidense.
Este martes Beryl se convirtió en un ciclón postropical, y avanzó hacia el noreste, rumbo a Canadá, con vientos de 45 km/h. N
(Con información de AFP)
