Irán llevó a cabo este jueves 8 de diciembre la primera ejecución vinculada con las protestas por la muerte de Mahsa Amini. Un hombre fue ahorcando “por haber bloqueado una calle y haber herido a un miembro de la fuerza paramilitar Basij”, informaron las autoridades.
En Irán las protestas no se han detenido tras la muerte el 16 de septiembre de Mahsa Amini, una kurda iraní de 22 años fallecida tras ser arrestada por la policía de la moral. El motivo de su detención, argumentó la autoridad, fue “vulnerar el código de indumentaria del país”, que obliga a las mujeres a llevar velo.
La agencia del poder judicial, Mizan Online dijo que “Mohsen Shekari, de 23 años, era un alborotador que bloqueó el bulevar Sattar Khan [en Teherán] el 25 de septiembre y apuñaló con un machete a un Basij. Por ello fue ejecutado”.
El veredicto preliminar del caso fue emitido el 1 de noviembre por el tribunal revolucionario de Teherán y la Corte Suprema rechazó el recurso el 20 de noviembre, llevando a la ejecución de la pena, informó la agencia de prensa del poder judicial.
La autoridad judicial asegura que Shekari se reconoció culpable de haberse peleado y de haber desenfundado “su arma con la intención de matar, de provocar terror y de perturbar el orden y la seguridad de la sociedad”. “Hirió intencionalmente a un Basij con arma blanca mientras este cumplía con su deber y bloqueó la calle Sattar Khan en Teherán”, añade la agencia. Basij es una fuerza paramilitar vinculada a los Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de Irán.
El activista por la libertad de expresión Hosein Ronaghi, recientemente liberado de prisión, advirtió a las autoridades: “la ejecución de cualquier manifestante tendrá graves consecuencias para ustedes. Arrebatarle la vida a una persona es arrebatarnos nuestras vidas a todos. ¿Tienen horcas suficientes?”.
“La comunidad internacional debe reaccionar de inmediato y con fuerza a esta ejecución”, dijo Mahmood Amiry-Moghaddam, director del grupo con sede en Noruega Irán Human Rights, en un comunicado. “Si la ejecución de Mohsen Shekari no tiene graves consecuencias para el gobierno, nos enfrentaremos a la ejecución masiva de manifestantes”, agregó.
En total, diez personas están condenadas a muerte por manifestarse. El poder judicial dijo que hay condenados a muerte por “inmisoriedad contra Dios” o “corrupción en la Tierra”. Hasta el momento no se han revelado las identidades de los acusados. Amnistía Internacional dijo que “las sentencias de muerte fueron diseñadas para reprimir aún más el levantamiento popular e infundir miedo”. N
(Con información de AFP y BBC)
