La sequía en Durango ha incrementado la presencia de plagas forestales, en particular del gusano descortezador, que ha afectado aproximadamente 300 hectáreas en ejidos del municipio de San Dimas, según informó Claudia Hernández Espino, titular de la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente.

Aunque no existe una cifra exacta sobre el daño causado, autoridades locales y personal de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) han sobrevolado la región afectada para monitorear la situación y aplicar medidas de control.

Los ejidatarios y técnicos forestales han recibido orientación sobre el manejo adecuado para minimizar los daños en los árboles.

Además, la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente, en conjunto con autoridades federales, mantiene un monitoreo constante en la zona para contener el avance de la plagas forestales.

Hernández Espino también informó sobre un incendio reciente en la Sierra del municipio de Durango, en el ejido Salvador Allende, donde los ejidatarios colaboraron para controlar el fuego a pesar de las complicaciones ocasionadas por fuertes ráfagas de viento. Este incendio no dejó daños materiales significativos y fue controlado rápidamente, aunque generó preocupación debido a la cercanía de un complejo turístico en la zona.

La funcionaria señaló que el 95 por ciento de los incendios son provocados por actividades humanas, y exhortó a la población a extremar precauciones para reducir estos incidentes.

Aunque Durango ha recibido lluvias en semanas recientes, estas no han sido suficientes para mitigar los riesgos de plagas e incendios en el área forestal. La secretaria comentó que la población de la sierra espera heladas importantes en la temporada, las cuales podrían ayudar a controlar estos problemas naturales.

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