La organización de periodismo ProPublica difundió un video donde muestra las últimas horas de vida de Carlos Gregorio Hernández Vásquez, un joven migrante guatemalteco de 16 años que fue encontrado muerto en una celda de la Patrulla Fronteriza y quien no recibió la atención médica adecuada.
El video muestra que el adolescente enfermo estaba recluido en una celda sin atención médica y su cuerpo no fue descubierto hasta que su compañero alertó a las guardias.
Esto contradice la versión de la Patrulla Fronteriza que en un comunicado emitido el pasado 20 de mayo informó que el menor “fue encontrado sin respuesta esta mañana durante un control de bienestar”.
Y donde John Sanders, Comisionado interino de Aduanas y Protección Fronteriza, declaró que “CBP está comprometido con la salud, la seguridad y el trato humano de quienes están bajo nuestra custodia ”, además dijo desconocer la causa de muerte del joven.
De acuerdo con la organización, Carlos Hernández fue diagnosticado por una enfermera practicante con gripe y tenía 39 grados de temperatura; la enfermera determinó que si su condición empeoraba debía ser enviado a los servicios de emergencias.
Sin embargo, los agentes de inmigración lo enviaron a una celda con otro joven enfermo en la tarde del 19 de mayo por temor que contagiara a otros reclusos de las instalaciones del centro de detención de McAllen, Texas.
Al día siguiente Carlos Hernández fue encontrado muerto cerca del área del inodoro.
“El video del bloque de celdas muestra a Carlos retorciéndose durante al menos 25 minutos en el piso y un banco de concreto. Lo muestra tambaleándose hacia el baño y desplomándose en el piso, donde permaneció en la misma posición durante las siguientes cuatro horas y media”, reportó ProPublica.
Además ProPublica denuncia que los trabajadores de la salud en el centro de detención de Weslaco omitieron señales cada vez más evidentes de que su condición era peligrosa.
