
Donald Trump ha desatado una nueva ola de tensiones comerciales globales al anunciar aranceles generalizados que afectan a múltiples socios comerciales, incluida China, que respondió con medidas equivalentes. Mientras tanto, las principales bolsas de valores del mundo —incluidas las de México, Brasil y Argentina— sufren caídas significativas.
El presidente de Estados Unidos acusó a Pekín de haber entrado en “pánico” tras sus anuncios y se mostró indiferente ante la volatilidad de los mercados financieros, que ya reflejan pérdidas multimillonarias.
La respuesta china no se hizo esperar: el gobierno de Pekín anunció nuevos aranceles del 34% a productos estadounidenses a partir del 10 de abril, junto con controles a las exportaciones de tierras raras, como el gadolinio y el itrio, elementos fundamentales en tecnologías médicas y electrónicas.
En paralelo, Trump confirmó el aumento de aranceles estadounidenses del 10% al 34% para China, y del 20% para la Unión Europea. A esto se suman las tarifas del 25% ya aplicadas a acero, aluminio, automóviles y autopartes, con excepciones solo para México y Canadá, socios del T-MEC.
Los mercados financieros reaccionaron con fuerza a la escalada. Wall Street cerró con una caída del -6%, acumulando más de 6 billones de dólares en pérdidas. Las bolsas europeas también se desplomaron: París cayó 4,3%, Fráncfort y Londres alrededor del 5%, y en Asia, el índice Nikkei de Tokio cedió un -2,75%, mientras que el Topix perdió -3,37%.
Los precios del petróleo y el cobre también sufrieron retrocesos superiores al 7%.
Las principales bolsas de América Latina no quedaron exentas del impacto:
Bolsa Mexicana de Valores (BMV): cayó -4,87%, cerrando en 51,452.73 puntos, afectada a pesar de no estar directamente en la lista más reciente de gravámenes.
Sao Paulo (IBovespa): perdió un -2,96%, con una fuerte presión sobre las exportaciones brasileñas, especialmente por el arancel del 25% al acero.
Buenos Aires (Merval): protagonizó una de las caídas más fuertes, con -7,38%, arrastrada por el temor a una contracción comercial global.
Pese a las alertas económicas, Trump defendió su postura desde su red Truth Social, afirmando que su estrategia busca fortalecer la economía estadounidense. “Este es un gran momento para hacerse rico, ¡más rico que nunca!”, escribió. Añadió también: “¡Solo los débiles fracasarán!”.
El presidente estadounidense minimizó las advertencias de expertos como Jerome Powell, titular de la Reserva Federal, quien advirtió que los aranceles podrían aumentar la inflación, elevar el desempleo y ralentizar el crecimiento económico.
La secretaria general de la UNCTAD, Rebeca Grynspan, subrayó que el alza de aranceles afectará más severamente a los sectores pobres y vulnerables, tanto en países desarrollados como en economías emergentes.
Por su parte, la Unión Europea y países como Vietnam han intensificado sus esfuerzos diplomáticos para evitar una guerra comercial prolongada. Vietnam incluso ofreció eliminar sus aranceles si logra un acuerdo con Washington. N
(Con información de AFP)