El viernes pasado, en su testimonio contra Keith Rainere, fundador de la presunta secta sexual NXIVM, Lauren Salzman dio detalles de la supuesta violencia que ella y otras mujeres miembros experimentaron a manos de Rainere. Este mes, a él se le imputaron nuevos cargos de pornografía infantil y de explotación de una persona menor de edad, además de las acusaciones presentadas el año pasado, relacionadas con lavado de dinero, tráfico sexual y otros crímenes supuestamente cometidos tras la fachada de su empresa NXIVM.
Salzman, que presentó un acuerdo con la fiscalía por su función en la secta como “ama de esclavas”, nombró a varios de los representantes principales de Raniere, conocidos como “DOS”, entre ellos, una mujer llamada Rosa Laura Junco, que no fue mencionada en la acusación inicial contra Raniere y otras personas, presentada en 2018. El sitio noticioso mexicano Eje Central señaló que Junco es la hija de Alejandro Junco, fundador de la empresa de medios Grupo Reforma.
Salzman, hija de Nancy Salzman, cofundadora de NXIVM y que también se declaró culpable por su participación en los crímenes de NXIVM, reveló que Raniere tenía planes de construir un calabozo en la lujosa casa del grupo en Nueva York y dijo que ella le ordenó a una de las mujeres de más alto rango de la secta que comprara “cosas de tortura sexual y sadomasoquismo”, de acuerdo con documentos del tribunal obtenidos tras juicio del viernes. Lauren Salzman señaló que el calabozo presuntamente incluiría una jaula “para las personas que estuvieran más comprometidas con su crecimiento”.
Adicionalmente, Lauren Salzman acusó a Raniere de tener relaciones sexuales con siete de las ocho personas que formaban parte del nivel más alto de la secta, entre ellas, Allison Mack, la actriz de Smallville, que también se declaró culpable en abril de acusaciones de extorsión y de conspiración para extorsionar. Nicki Clyne, esposa de Mack, también fue mencionada.
Lauren Salzman señaló que Junco fue la única mujer que no fue obligada a tener relaciones sexuales con Raniere, aunque no reveló las razones por las que Junco fue excluida de las prácticas sexuales grupales.
En las reuniones del grupo, se esperaba que las mujeres se castigaran unas a otras utilizando látigos y palas, señaló Lauren Salzman, y afirmó que, en ocasiones, Raniere “llamaba” para escuchar cómo se castigaban entre sí. Hubo ocasiones, señaló, en las que él asistió personalmente y utilizó una pala con púas para infligir dolor él mismo a las mujeres.
También afirmó que las mujeres eran obligadas a fotografiarse desnudas antes de cada reunión. De hecho, se esperaba que, rutinariamente, tomaran docenas de fotografías de las partes íntimas de las mujeres. “Él vio una de mis fotografías, mirando específicamente mi vagina, y dijo que quería saber por qué lucía tan bien arreglada”, dijo Lauren Salzman en los documentos del tribunal.
“Tomábamos fotografías de mujeres desnudas, acercamientos de sus vaginas, tres veces a la semana. Se nos estaban acabando las ideas sobre qué hacer”, continuó.
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Publicada en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek
