Alcaldes italianos han publicado una serie de videos en los que se ven molestos con los ciudadanos que no acatan el confinamiento obligado en el que el país está sometido por la pandemia del coronavirus.

Hasta este lunes, en Italia se registraron 6, 000 muertes; se registraron 600 muertos en las últimas 24 horas, un balance inferior a los registrados el sábado y el domingo.

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‘Mira, esto no es una película. No eres Will Smith en Soy Leyenda. Ve a casa”, dijo Giuseppe Falcomatà, alcalde de Reggio Calabria, a un hombre que corría con su perro, que se veía “notablemente agotado”.

"Guarda che questo non è un film, tu non sei Will Smith in Io sono leggenda, quindi passa pa casa"

Lui è il sindaco della mia città, Giuseppe Falcomatà.
Da Reggio Calabria è tutto✈️✈️#COVID2019italia pic.twitter.com/kwiroucvje

— 𝓶𝓶||🫀 (@mrsharmanx) March 21, 2020

Antonio Decaro, alcalde de Bari salió a las calles para cuidar que todos cumplieran con el decreto nacional por lo que “regañó” a las personas que se encontró en las calles.  “No se puede estar aquí, ¿cómo lo tengo que explicar?”.

En el video se ve a Decaro enfrentar a unos jóvenes que jugaban  en un parque. “No se puede jugar al ping-pong… a casa a jugar a la Play”, dice. “Soy el alcalde de esta ciudad y voy a hacer respetar el decreto”.

Vincenzo de Luca,  presidente de la región Campania, amenaza con mandar a la “policía con lanzallamas” a una fiesta de graduación que supuestamente se organiza en medio de la pandemia.

https://youtu.be/yAkQbfofdqw

“En mi territorio no se sale a dar paseos, advierte Cateno de Luca, alcalde de Messina. 

“¿No puedo prohibirles formalmente salir de casa? Muy bien, les prohíbo pisar el suelo público”, dice De Luca  al tiempo que da unos manotazos en su escritorio. 

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El alcalde de Luera, Antonio Tutolo criticó los servicios de peluquería a domicilio.

“Estas malditas peluqueras que van a las casas a arreglarle el pelo a las mujeres ¿para qué carajos sirven, entendieron que el ataúd va a ir cerrado? ¿Lo entendieron?, ¿quién las va a ver con los pelos arreglados en el ataúd”, dice Tutolo.