
Tras nueve días de que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) bloqueara una cuenta de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) por presunto lavado de dinero, el presidente del Patronato de la casa de estudios, Gerardo Sosa Castelán, dijo que la transferencia que hizo la institución –considerada por el sistema como un movimiento inusual– corresponde a un traspaso de 151 millones de dólares de un banco de Suiza a cuentas de HSBC, lo que, aseveró, mejora el rendimiento del dinero de la escuela.
En conferencia de prensa en la Cámara de Diputados, el líder de Grupo Universidad aseguró que el movimiento que hizo el órgano que encabeza en la UAEH desde “la banca de segundo piso” Credit Suisse cumple “toda la legalidad y transparencia”, e indicó que puede justificar el origen del dinero.
El exdirigente estudiantil rechazó “categóricamente” las imputaciones sobre operaciones ilícitas y presunto lavado de dinero que el 26 de febrero dio a conocer la UIF; además, señaló, el origen y destino de los recursos que maneja son auditados de manera periódica por las auditorías Superior Federal (ASF) y la estatal (ASEH).
Según Sosa Castelán, el Patronato destina su capital a fondos de inversión y seguros rentables, a través de bancos nacionales e internacionales, para obtener los “mejores” réditos y cumplir con jubilaciones, apoyo a programas académicos y de investigación, inversiones de infraestructura universitaria y “salvaguardar” el patrimonio universitario.
También insistió en que parte los cerca de 3 mil millones de pesos que transfirieron (151 millones de dólares) pertenece al fondo de los trabajadores administrativos y educativos de la UAEH.
“Es necesario aclarar que el capital depositado en Credit Suisse es producto del fondo de los trabajadores que se viene acumulando desde hace más de 20 años. Además, se generan rendimientos, y un logro más fue el obtener una paridad bancaria”, aseveró el exrector.
El exdirigente priista agregó que el 26 de febrero HSBC informó a la UAEH, mediante un correo electrónico, que “algunas” de sus cuentas habían sido bloqueadas por la UIF. No obstante, afirmó, hasta la tarde de ayer la universidad no había sido notificada de algún procedimiento legal en su contra, por lo que desconoce quién ordenó la inhabilitación de los recursos.
Por lo anterior, promovieron un amparo indirecto contra la obstrucción de la cuenta, pero el martes pasado el Juzgado Segundo de Distrito en Hidalgo negó la suspensión del bloqueo y programó una audiencia accidental y constitucional para el 12 de marzo.
En dicha comparecencia, el juez Óscar Herrera Perea decidirá si concede o niega la suspensión definitiva del capital universitario. Para ello, contará con los informes que dé
la UIF.
Aunque previamente el rector Adolfo Pontigo Loyola dijo que el bloqueo de una cuenta no afecta el pago a trabajadores, Sosa Castelán consideró que estas acciones generan daño a la UAEH y evitan que la institución pueda pagar la nómina de jubilados, pensionados y otros gastos programados.
“La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo lamenta que se intente dañar el prestigio de las universidades, en lo particular de la estatal, ya que estas instituciones gozan de la mayor credibilidad en nuestro país”, aseveró.
Asimismo, aseguró desconocer si hay “una embestida” por parte de algún grupo político contra la casa de estudios. Dijo que no se había presentado ante medios de comunicación porque esperaba que las autoridades probaran los señalamientos hechos al ente educativo.
“Esperemos el resultado; sigue un procedimiento en el amparo hasta que esto se resuelva, y ojalá que la Unidad (de Inteligencia Financiera) pueda resolver cuanto antes y aclarar cuanto antes por qué difundió estos comentarios (sic)”, agregó Sosa Castelán.
Giovanny Flores l Pachuca