En los próximos días, peritos de la Fiscalía General de la República (FGR) llegarán a Cuatro Ciénegas, Coahuila, para investigar los daños ocasionados a las pinturas rupestres de la región. Así lo informó el historiador Carlos Gutiérrez Recio, quien señaló que la visita forma parte de la averiguación en curso liderada por la Fiscalía General del Estado (FGE).
El municipio de Cuatro Ciénegas se encuentra a 274 kilómetros de Torreón, y 293 kilómetros de Monterrey. Esta localidad tiene una serie de atractivos naturales como parte de su legado prehistórico como la Poza Azul, el río Mezquites. Es una reserva de la biosfera que fue creada para proteger el ecosistema único y diverso de la cuenca de Cuatro Ciénegas, hogar de muchas especies endémicas de flora y fauna. Consiste en un pequeño valle conocido localmente como ‘Bolsón’ y está rodeado por un desierto y seis montañas cuya altitud supera los tres mil metros sobre el nivel del mar.
Alejandro Hernández, representante de la FGE, sostuvo una reunión con Héctor Díaz de León Arévalo, propietario del predio “La Lagartija,” y un grupo de guías ecoturísticos. Durante el encuentro, Hernández explicó que ya se habían recabado evidencias en el lugar afectado por el saqueo, pero destacó la importancia de conocer las perspectivas de los involucrados para fortalecer el caso.
Díaz de León detalló que otorga permisos limitados a guías ecoturísticos para llevar visitantes al sitio, con el fin de evitar aglomeraciones y proteger el entorno. Las pinturas rupestres, ubicadas en abrigos y cuevas, poseen un valor histórico invaluable que se remonta a cientos o incluso miles de años.
El reciente saqueo arqueológico en la zona ha generado alarma entre las autoridades y la comunidad local. Tanto el propietario como los guías turísticos están comprometidos con la preservación de este patrimonio cultural único.
La llegada de los peritos de la FGR será crucial para determinar el alcance del daño, establecer medidas legales y garantizar la conservación de este legado arqueológico de Cuatro Ciénegas.
La Cueva Pinta, resguarda un impresionante panel de arte rupestre que mide 5 metros de ancho, 3 metros de alto y 1.5 metros de profundidad. Este panel contiene más de 150 figuras en colores rojo, amarillo, blanco, negro y naranja, muchas de ellas superpuestas, lo que sugiere que fueron realizadas en diferentes periodos, desde hace aproximadamente 5,000 años hasta el siglo XVI.
Considerada un símbolo de las culturas del desierto, este sitio ha sido objeto de múltiples investigaciones, proyectos académicos, publicaciones científicas y ponencias. Sin embargo, recientemente ha captado la atención por un hecho lamentable: la pérdida irreversible de una de las pinturas rupestres del panel, que fue arrancada de la pared con una sierra eléctrica.
Mientras la investigación avanza, la comunidad espera que las autoridades actúen con firmeza contra los responsables de este acto de saqueo. Como destacó el historiador Carlos Gutiérrez Recio, proteger y conservar las pinturas rupestres es fundamental para preservar el patrimonio histórico y cultural de la región. N
