El ejército de Corea del Sur informó este viernes 21 de junio que realizó disparos de advertencia luego de que soldados norcoreanos cruzaran brevemente la frontera fuertemente fortificada, en la tercera incursión de este tipo en lo que va del mes.
Corea del Norte, que posee armas nucleares, ha estado reforzando la frontera en los últimos meses, añadiendo carreteras tácticas y colocando más minas terrestres. El hecho ha provocado “víctimas” entre sus tropas debido a explosiones accidentales, según Seúl.
“Varios soldados norcoreanos que trabajaban en el interior de la DMZ [zona desmilitarizada], en la línea del frente central, cruzaron la Línea de Demarcación Militar”, declaró el Estado Mayor Conjunto. En ese sentdio, agregó que el incidente se produjo el jueves hacia las 11:00 horas locales.
Tras unos disparos de advertencia, “los soldados norcoreanos retrocedieron hacia el norte”, indicó el Estado Mayor surcoreano. Incidentes similares ocurrieron el 9 de junio y el martes pasado, pero los militares de Seúl dijeron que ambas incursiones parecían accidentales.
Las relaciones entre las dos Coreas se encuentran en uno de sus momentos más bajos de los últimos años. El dirigente del hermético país comunista, Kim Jong Un, recibió esta semana al presidente de Rusia, Vladimir Putin, y firmó un acuerdo de defensa mutua que ha irritado a Seúl.
Corea del Sur, un importante exportador de armas, comentó en respuesta que “reconsiderará” una política de larga data que le ha impedido suministrar armas directamente a Ucrania.
“Mientras la atención se centra en las colaboraciones parias de Putin, el régimen de Kim está poniendo en peligro imprudentemente a los soldados con obras apresuradas en la frontera intercoreana”, afirmó Leif-Eric Easley, profesor de la Universidad Ewha de Seúl.
Las obras están probablemente dirigidas “tanto a mantener a sus compatriotas dentro, como a mantener a los surcoreanos fuera. La falta de canales de comunicación intercoreanos y de mecanismos de creación de confianza aumenta el peligro de escalada en las zonas fronterizas”, advirtió el profesor.
Las dos Coreas también se han enzarzado en una “guerra de globos”. Un activista del Sur confirmó el viernes que había enviado más globos con propaganda hacia el Norte.
Es una medida que de seguro desencadenará una respuesta de Pyongyang, que ya ha enviado más de 1,000 globos con basura hacia el Sur. La influyente hermana de Kim, Kim Yo Jong, dijo que se habían detectado “pañuelos y objetos sucios” cerca de la frontera, y advirtió que el Norte iba probablemente a responder.
“Es obvio que algo pasará, después de que hicieran algo que les dijimos claramente no hacer”, afirmó en un comunicado difundido por la agencia oficial KCNA.
Legalmente, Seúl no puede impedir que los activistas envíen globos a través de la frontera, después de que un tribunal dictaminara en 2023 que era una infracción injustificable de la libertad de expresión.
El activista Park Sang-hak, un exnorcoreano que desertó y lleva años enviando al Norte panfletos contra el régimen, apuntó que había hecho volar 20 globos a través de la frontera el jueves, con propaganda y memorias flash de música K-pop y K-drama.
El Norte es extremadamente sensible al acceso de su población a la cultura pop surcoreana. Un informe de Naciones Unidas afirma que la posesión de grandes cantidades de este tipo de contenidos ha sido castigada con la pena de muerte.
Corea del Norte ha tachado los globos de propaganda de “guerra psicológica” y ha advertido de que responderá a cada lanzamiento con la misma moneda.
Las tensiones desatadas por la propaganda ya han estallado en otras ocasiones de forma dramática. En 2020, a raíz de panfletos contra el Norte, Pyongyang cortó unilateralmente todos los enlaces oficiales de comunicación militar y política con Seúl e hizo explotar una oficina de enlace intercoreana en desuso en su lado de la frontera. N
(Con información de AFP)
