La lista de espera de pacientes que aguardan la donación de algún órgano crece de manera inexorable. El año 2023 cerró con 19,921 pacientes en lista de espera; al primer trimestre de este año la cifra llegó a 20,136; es decir, un aumento de un punto porcentual. Son muchos los factores que inciden en esta situación. Para conocer los retos en esta materia consultamos a los expertos del Centro de Trasplantes Multiorgánicos de TecSalud, quienes coinciden en señalar que algunos factores relevantes como una mayor coordinación institucional, la baja tasa de donación y la falta de cultura en México son algunos de ellos.
Para beneficio de los pacientes en lista de espera, uno de los desafíos más importantes radica en mejorar la coordinación entre instituciones. En opinión de César Eliud Escareño Pérez, director de Trasplantes de TecSalud, un área de oportunidad es evitar que la distribución de órganos se haga dependiendo del tipo de institución, pública o privada, de la que proceda el órgano. De hecho, TecSalud busca promover una mayor colaboración e intercambio entre hospitales, ya sean del IMSS, ISSSTE, de los sistemas estatales de salud o los privados.
Otro tema pendiente es crear un sistema que lleve los órganos a los pacientes que más lo requieran. Es decir, que la distribución de los órganos sea según la gravedad y/o avance de su enfermedad.
“Tengo varios pacientes pediátricos en lista de espera, los cuales ya llevan dos años aguardando un hígado, un riñón”, dice.
Y una mejor coordinación entre instituciones podría generar mejores resultados entre la población que requiere de un trasplante.
De acuerdo con el Centro Nacional de Trasplantes, en 2023 se concretaron 2,681 donaciones de órganos de personas fallecidas. Sin embargo, al compararlo con otros países la tasa de donación en México es muy baja. Países como España y Estados Unidos tienen una tasa superior a 40 por ciento y nuestro país solo tiene 5 por ciento.
“En México hay una lista de cerca de 20,000 pacientes en espera de un riñón y se hacen entre 2,000 y 3,000 trasplantes al año, y de estos casi 60 o 70 por ciento son de donador vivo. La mayoría de los trasplantes de riñón en México son de alguien que los da en vida, cuando en los países más desarrollados son de pacientes fallecidos”, manifiesta Alejandro Valdés Canales, especialista en Nefrología con subespecialidad en Trasplante Renal de TecSalud.
El médico considera que con un aumento en la tasa de donación de órganos se podría hacer el triple o el cuádruple de procedimientos de este tipo.
En tanto, Juan Gerardo Carmona, coordinador de trasplantes de órgano sólido pediátrico en TecSalud, añade que cualquier persona, sin importar edad o condición, puede ser donador de órgano.
“Hay que saber que la circunstancia en la que se dona es muy particular. Tiene que ser generalmente un paciente en terapia intensiva con daño cerebral, ya sea por un donador en deceso (que es con muerte cerebral, que es el más óptimo) o en paro cardiaco. Ambos generalmente están en circunstancias donde hay un daño cerebral severo. En el primero, en muerte cerebral, se tiene que diagnosticar para hacerlo con todos los controles que se requieren para que los órganos estén en óptimas condiciones. Y en el segundo tiene que ser por paro cardiaco, donde se retire el apoyo de soporte ventilatorio y apoyo de medicamento”, explica Carmona.
Otro de los retos en la donación y trasplantes de órganos en México es la creación de indicadores que midan el éxito de estos procedimientos.
“Estados Unidos tiene un registro nacional de estadística de trasplantes donde puedes ver qué mortalidad y qué sobrevida tiene el centro donde eliges trasplantarte. Eso es algo que en México no tenemos, yo sueño con algún día llegar a esto”, sostiene Escareño Pérez.
En TecSalud se ofrece esta información como parte de su práctica, que consiste en pacientes atendidos por un grupo multidisciplinario que da seguimiento una vez hecho el trasplante.
“En Estados Unidos la mayoría de los programas que reportan sobrevida al primer año de trasplantes es por arriba de 95 por ciento. Aquí en en TecSalud, en el caso de riñón, estamos teniendo sobrevida de 98 por ciento del paciente y del órgano en el primer año”, informa Valdés Canales.
En TecSalud se realizan trasplantes de órganos desde hace décadas y fue la primera institución privada en hacer uno renal en 1975. De hecho, durante la pandemia siguió realizando estos procedimientos y ocupó uno de los primeros cinco lugares de trasplantes de hígado en el país.
“En 2023 hicimos nueve trasplantes de hígado, terminamos en el lugar número uno de hospitales privados de la región y en el número dos a nivel nacional. Eso solo te habla de la poca actividad que hay de trasplantes en el país, porque nosotros estamos listos y deseamos hacer muchos más. En 2023 hicimos 14 riñones, nueve hígados, por primera vez abrimos el programa de trasplante pulmonar, trasplantamos 21 córneas, y somos también de los que más trasplantan en México médula ósea”, concluye Escareño Pérez.
Además, en diciembre de 2023 se realizó con éxito el primer trasplante bipulmonar en TecSalud, un caso de muy alta complejidad. N
