La Organización Mundial de la Salud (OMS) registra un aumento de casos y muertes por cólera en 2024 y dice que la respuesta a la enfermedad se ve afectada por la falta de vacunas; el resurgimiento global del cólera se ha clasificado con el nivel más alto de emergencia y las reservas mundiales de vacunas se agotaron a principios de marzo pasado.
Del 1 de enero al 28 de abril de 2024 se notificó un total acumulado de 145,900 casos de cólera y 1,766 muertes en 24 países de cinco regiones de la Organización Mundial de la Salud. África registró las cifras más altas, seguida del Mediterráneo Oriental, América, Sudeste Asiático y Europa. No se ha informado de ningún brote en la región del Pacífico Occidental durante este periodo.
La respuesta al cólera sigue siendo afectada por una grave escasez de vacunas orales. Desde enero de 2023, las solicitudes por el inmunizante han aumentado, con 82 millones de dosis solicitadas por 15 países, casi el doble de los 46 millones de dosis producidas durante este periodo.
Las reservas mundiales de vacunas se agotaron a principios de marzo. El 6 de mayo de 2024, en existencia había 3,2 millones de dosis, lo que está por debajo del objetivo global de 5 millones de dosis. Aunque la oferta mundial de vacunas orales contra el cólera aumentó dieciocho veces entre 2013 y 2023, “el enorme crecimiento de la demanda en comparación con la disponibilidad actual ha puesto presión sobre las reservas mundiales”.
Según la OMS, muchas campañas de vacunación preventiva tuvieron que posponerse para preservar las dosis para los esfuerzos de respuesta a los brotes de emergencia. La OMS clasificó el resurgimiento mundial del cólera como una emergencia de grado 3 en enero de 2023, el nivel más alto para las emergencias.
En 2024, basándose en el número de brotes y la expansión geográfica, junto con la escasez de vacunas y otros recursos, la OMS reevaluó el riesgo a nivel mundial como muy alto y la enfermedad permanece clasificada como emergencia de grado 3.
El cólera es una enfermedad diarreica aguda que puede matar en pocas horas si no se trata. Se considera una “enfermedad de la pobreza” que afecta a personas con acceso inadecuado al agua potable y al saneamiento básico. Según la OMS, los conflictos, la urbanización no planificada y el cambio climático aumentan el riesgo de cólera. N
