Los bebés están naciendo “en el infierno” en Gaza y es probable que muchos otros mueran como resultado del conflicto con Israel y de las condiciones cada vez más graves en el enclave, advirtieron los trabajadores humanitarios de la ONU este viernes 19 de enero.
Al reiterar urgentes llamamientos internacionales a un alto al fuego, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) informó que ha habido casi 20,000 nacimientos desde el inicio del bombardeo israelí generalizado, en respuesta a los ataques dirigidos por Hamás en Israel el 7 de octubre pasado.
Los problemas crónicos de acceso a la ayuda han significado que las cesáreas se han realizado sin anestesia, mientras que otras mujeres no han podido dar a luz a sus bebés nacidos muertos porque el personal médico está abrumado, dijo la agencia de la ONU.
En Gaza “un bebé nace en esta horrible guerra cada 10 minutos”, indicó la especialista en comunicaciones de UNICEF, Tess Ingram. El líder de comunicaciones del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para Oriente Medio y el Norte de África, Abeer Atefa, dijo que “en zonas más allá de Rafah, la asistencia es casi catastrófica”.
“Las madres se enfrentan a desafíos inimaginables para acceder a la atención médica, la nutrición y la protección adecuadas antes, durante y después del parto”, dijo Ingram. “Convertirse en madre debería ser un momento para la celebración. En Gaza es otro niño entregado al infierno”, añadió.
Haciendo eco de su profunda preocupación por el deterioro de la situación humanitaria, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de las Naciones Unidas, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su alarma de que se habían confirmado infecciones por hepatitis A en Gaza.
“Las condiciones de vida inhumanas, apenas agua limpia, baños limpios y la posibilidad de mantener los alrededores limpios, permitirán que la hepatitis A se propague aún más y resaltarán lo explosivamente peligroso que es el medio ambiente para la propagación de enfermedades”, tuiteó Tedros en X, este jueves 18 de enero.
Los últimos datos de la OMS indican que, en promedio, 500 personas comparten un baño y más de 2,000 personas tienen que usar una sola ducha, lo que aumenta el riesgo de propagación de la enfermedad.
Además de un fuerte aumento de las infecciones de las vías respiratorias superiores, los casos de diarrea entre los niños menores de cinco años registrados durante los últimos tres meses de 2023 fueron 26 veces más altos que los informes del mismo período en 2022, señaló la agencia de salud de las Naciones Unidas. N
