En Baja California, además de lidiar con salarios bajos, los agentes de la Policía Municipal se enfrentan a la falta de seguridad social, y la escasez de personal impide que los más veteranos se retiren una vez que cumplen los años de servicio requeridos.

Roberto Quijano Sosa, presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California, manifestó su preocupación por la imposibilidad de aprobar los retiros por edad debido a la falta de reposición de fuerza laboral. “La policía se enfrenta a un desafío significativo en cuanto a jubilaciones y pensiones para los agentes, ya que algunos ya están en edad de retirarse, pero la academia no proporciona suficientes recursos para reintegrarlos. Se podrían retirar 100 agentes y solo se lograrían reincorporar 40”, explicó Quijano Sosa.

En respuesta a las demandas de la Asociación de Policías de Tijuana, Quijano Sosa señaló la importancia de revisar las condiciones salariales y de seguridad social de los agentes, ya que su labor implica un alto riesgo y es crucial garantizar aspectos relacionados con su vida en caso de fallecimiento o lesiones que les impidan seguir en servicio. “Debemos revisar no solo su salario, sino también su seguridad social, beneficios en vivienda, como Infonavit, y programas de retiro y seguros de vida. Es fundamental determinar en qué condiciones puede continuar una vida normal si un policía pierde la vida o queda incapacitado de alguna manera”, agregó.

Desde su perspectiva, este desafío plantea un gran reto para la Secretaría de Seguridad Municipal, pero también es responsabilidad e interés de los ciudadanos, ya que la seguridad y el apoyo a aquellos que trabajan por mantenerla son responsabilidad de todos. “Es un desafío que el Secretario de Seguridad Pública y la sociedad en general deben enfrentar, ya que nos corresponde apoyar de alguna manera al equipo de la policía municipal”, concluyó Quijano Sosa.

Esta problemática revela la importancia de brindar un adecuado respaldo a los agentes de la Policía Municipal, no solo en términos de sueldos justos, sino también en cuanto a la seguridad social y los beneficios que les permitan enfrentar los riesgos y desafíos inherentes a su labor. La sociedad en su conjunto debe reconocer la labor que estos valientes servidores públicos desempeñan y trabajar en conjunto para garantizar su bienestar y el correcto funcionamiento de la corporación. N