Este nuevo año está acompañado de mucha especulación sobre cómo se comportará la economía nacional, tras haber presentado tasas inflacionarias récord y además ante una posible recesión en Estados Unidos, que es el principal socio comercial del país.

Sin embargo, no todas las suposiciones son un foco rojo para México. Por eso, Luis Felipe Treviño, managing director de la firma de inversión privada Beamonte Investments, nos dice con exactitud cuáles son las predicciones económicas para este 2023.

De entrada, se prevé que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) real se desacelere hasta 1.6%, pero con un repunte de 2.1% en 2024. Esto significa que en los próximos meses el crecimiento será más lento, pero seguirá avanzando con un claro progreso el próximo año.

“El consumo se verá respaldado por la mejora gradual del mercado laboral, aunque la elevada inflación le restará fuerza. La inflación global tenderá a bajar por segundo año, pero todavía van a prevalecer factores que la presionarán del lado de la oferta como de la demanda”, dice el experto.

Por otro lado, Treviño estima que la economía de Estados Unidos tendrá una recesión ligera a partir del segundo o tercer trimestre y tendrá una variación del PIB de entre el -0.5 al +0.5% anual.

“México debe cuidar y aprovechar su posición geográficamente estratégica y la oportunidad de incrementar el intercambio comercial con muchas naciones y no sólo con el país vecino del norte”, menciona el director. “La inversión extranjera directa mantendrá un flujo positivo en la primera mitad del año”.

Otro factor a considerar es que el Banco de México continuará con alzas en su tasa de referencia durante el primer trimestre, ubicándose su tasa terminal en 11% anual. Después mantendrá su tasa de referencia conservando el diferencial de 600 puntos base sobre el Sistema de la Reserva Federal (Fed), que es el banco central de Estados Unidos.

En opinión de Treviño, México necesita que la salud de las finanzas públicas no se comprometa por la adquisición de mayor deuda y que las erogaciones estén destinadas a proyectos productivos con efectos multiplicadores en la economía nacional.

En cuanto al petróleo, todo apunta a que se darán las condiciones para que el barril promedie unos 100 dólares en el conjunto de 2023 (un 26% más que ahora con un máximo de 110 dólares, dadas las sanciones a Rusia, los bajos inventarios y la recuperación china.

Finalmente, en 2023, países de todo el mundo tomarán decisiones vitales sobre la regulación de las criptomonedas. La Unión Europea dará un paso muy importante para votar e implementar la Ley para Mercados de Criptoactivos (MiCAR o MiCA, por sus siglas en inglés), que establece un marco para regular la emisión de criptomonedas y activos, y las transacciones, como por ejemplo el trading, las inversiones y los pagos.

Esta ley contiene varias provisiones que según los reguladores son necesarias para “controlar más estrictamente el lejano oeste que es el mundo de las criptomonedas. Ya veremos”, concluye el experto.