Desde Estados Unidos en la primera edición, en 1930, a Corea del Sur y Turquía en 2002, otros equipos dieron la sorpresa al alcanzar las semifinales de un Mundial, antes de Marruecos en 2022.
Aunque se metió en semifinales en una sola ocasión, la URSS del legendario arquero Lev Yashin no fue una sorpresa en 1966, ya que era campeona de Europa en 1960 y subcampeona en 1964.
En las primera décadas del futbol, el “soccer” conoce cierto auge en Estados Unidos y vive una corta época dorada en los años 1920, con un primer campeonato federal, la American Soccer League, que se desmorona en 1933. Con camisetas y pantalones blancos y medias azules, el equipo de Estados Unidos estaba compuesto esencialmente por jugadores británicos recientemente nacionalizados, cinco escoceses y un inglés.
El pitido inicial del USA-Bélgica (3-0) suena al mismo tiempo que el Francia-México. Son los dos primeros partidos en un Mundial. Ante Paraguay (3-0), el delantero de Estados Unidos Bertram Patenaude, firma el primer hat-trick, pero en semifinales el “Team USA” sufriría la ley de Argentina (6-1).
En 1962, alentada por sus aficionados, la Roja cuajó un Mundial histórico bajo la actuación estelar de su delantero Leonel Sánchez (4 goles). Salió airosa de un grupo temible al derrotar a Suiza (3-1) y después a Italia (2-0) en un partido muy duro que pasó a la posteridad como la “Batalla de Santiago”. Los dos equipos multiplicaron las acciones antideportivas, dos italianos fueron expulsados y la policía tuvo que intervenir en varias ocasiones para separar a los jugadores. En cuartos, Chile batió a la URSS (2-1) antes de ver cortado su camino por Brasil (4-2) con sendos dobletes de Vavá y Garrincha. Cosecharon el tercer puesto en el último minuto ante Yugoslavia (1-0).
Con una generación excepcional, Bulgaria alcanzó las semifinales en Estados Unidos en 1994. El líder era Hristo Stoichkov, máximo goleador del torneo junto con el ruso Oleg Salenko (6 goles). Pero detrás de la estrella del Barça de Johan Cruyff aparecían jugadores como Emil Kostadinov, Krasimir Balakov, el emblemático calvo Yordan Lechkov, verdugo de Alemania en cuartos (2-1) con un remate de cabeza, o el central de larga melena y barba Trifon Ivanov.
La aventura terminó contra la Italia de Roberto Baggio (doblete) en semifinales (2-1), y los búlgaros se quedaron sin energías en el partido por el tercer puesto, perdido 4-0 con Suecia.
En 2002, llevada en volandas por un público entregado y en medio de arbitrajes considerados por algunos como caseros, la Corea del Sur de Guus Hiddink se convirtió en el primer semifinalista del continente asiático. Derrotó a Italia (2-1 en la prórroga) en octavos de final con un gol de oro de Ahn Jung-hwan, después a España en los penales (0-0; 5-3) antes de ceder contra Alemania (1-0).
Turquía, en su segunda participación después de 1954, hizo llorar a la otra anfitriona, Japón (1-0) en octavos, después a Senegal (1-0 en la prórroga) en cuartos con un gol de Ilhan Mansiz, antes de entregar las armas ante el Brasil de Ronaldo (1-0). Los turcos ganaron el partido por el tercer puesto (3-2) con el gol más rápido de la historia del Mundial, firmado por Hakan Sukur tras 10.8 segundos.
Este país de África afronta “recuperado y sin bajas” las semifinales del Mundial en Catar, el próximo miércoles 14 de diciembre ante Francia, señaló este martes en rueda de prensa su ambicioso seleccionador Walid Regragui, que quiere “ganar el Mundial”. Marrucos hizo historia la semana pasada cuando pasó por primera vez a cuartos de final en un mundial tras dejar fuera a España y después a Portugal con un marcador final de 1-0.
“Queremos ganar por África, por los países en desarrollo en fútbol. Repito, no estamos cansados, mañana vamos a correr, por Europa, por África, por el Magreb, por nuestros hermanos del África subsahariana, por todos los que soñaron con ver a África en la final o en las semifinales de la Copa del Mundo”, dijo Regragui. N
(Con información de AFP)
