“Yo no crucé la frontera, la frontera me cruzó”, mencionó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante una reunión con migrantes en Laredo, Texas. Estas palabras son parte de una estrofa del corrido “Somos más americanos”, del grupo Los Tigres del Norte, quienes actualmente son un referente del mandatario mexicano para hablar de migración y los pueblos de América en sus habituales conferencias matutinas.
El pasado 5 de mayo, desde Palacio Nacional, López Obrador pidió reproducir esta canción como dedicatoria a los migrantes mexicanos que viven y trabajan en Estados Unidos. También, en respuesta a los señalamientos del gobernador de Texas, Greg Abbot, que analizó la posibilidad de declarar una “invasión en su territorio” ante el arribo masivo del sector.
“Ya me gritaron mil veces que me regrese a mi tierra,
porque aquí no quepo yo.
Quiero recordarle al gringo: yo no crucé la frontera, la frontera me cruzó.
América nació libre, el hombre la dividió.
Ellos pintaron la raya, para que yo la brincara
Y me llaman invasor”, dice un fragmento de la canción incluida en el álbum ‘Uniendo fronteras’, lanzado en 2001.
Días más tarde, AMLO solicitó “América”, tema que canta la banda originaria de Sinaloa con René Pérez Joglar, de Calle 13, apuntando que nadie puede hablar en nombre de todo el continente americano. Lo anterior, cuando AMLO aún esperaba que su homólogo estadounidense, Joe Biden, invitara a todos los países de la región a la Cumbre de las Américas.
El 26 de mayo, la canción que se escuchó en la “mañanera” fue “La jaula de oro”. Este es un icónico corrido de 1984 que también le dio nombre a uno de sus álbumes más exitosos. Con la frase “Para mis paisanos”, López Obrador habló sobre la creación de un programa que permita a los migrantes que viven en Estados Unidos regresar a México con vivienda y seguridad social.
Sin embargo, AMLO no es el único en utilizar las creaciones de Los Tigres del Norte para poner sobre la mesa temas de interés colectivo. En junio, durante la novena edición de la Cumbre de las Américas en el Microsoft Theather de Los Ángeles, California, un grupo de migrantes se reunió afuera de las inmediaciones del recinto con banderas de distintos países y hasta un estandarte de la Virgen de Guadalupe.
Con la canción “El mojado acaudalado”de fondo, lanzaron consignas como “El que no salte es migra”. Con ello aludían al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, así como al personal de la Patrulla Fronteriza de ese país.
“Nosotros como cronistas tenemos que seguir cantando y diciendo lo que el pueblo sufre y cómo es oprimido en ciertas áreas”, declaró Jorge Hernández, líder de la agrupación sinaloense, en una de sus presentaciones.
Uno de sus sencillos más populares es “La granja”, el cual fue censurado en un evento por sus referencias políticas sobre el clima de inseguridad y violencia en México. La idea de la canción era retratar el país durante el sexenio de Felipe Calderón; esta guerra entre militares y cárteles de la droga.
Hay un fragmento que dice: “Los puerquitos le ayudaron, se alimentan de la granja. Diario quieren más maíz y se pierden las ganancias”. En donde quisieron proyectar la imagen de los políticos mexicanos, quienes son representados por los moneros como animales que devoran el dinero.
En la última estrofa retoman el problema de la migración. Esta es metaforizada a través de un cerco, el cual impide que el granjero se vaya “porque la perra lo muerde, aunque él no esté de acuerdo”. Aunado a esta censura, temas como “Jefe de jefes”, “La reina del sur”, “El circo”, “R-Uno”, “La neta de las netas” y varios más también han sido desaprobadas por el gobierno mexicano.
Su historia se remonta al pueblo de Rosa Morada, Sinaloa, en 1968. En esa época, Jorge Hernández —líder de la agrupación y hoy de 69 años— convenció a sus hermanos Raúl, Hernán y a su primo Óscar de formar un grupo. Sus primeros encuentros fueron en restaurantes de Los Mochis, después se trasladaron a Mexicalli, Baja California.
En su primer viaje a Estados Unidos, contratados para tocar en California, un agente de inmigración les preguntó por el nombre de la banda, título que todavía no existía. Al mirar sus rostros jóvenes decidió llamarlos “little tigers”, pero luego los bautizó como Los Tigres del Norte, pues algún día crecerían.
En sus 54 años de carrera han grabado más de 55 álbumes y más de 700 canciones, con una cifra superior a las 30 millones de copias vendidas. Tienen discos de platino, oro y diamante y han obtenido infinidad de premios Grammy y otros reconocimientos.
Dentro de la industria cinematográfica, han participado en más de 16 películas. En sintonía con sus actividades musicales, crearon la Fundación Los Tigres del Norte, cuyas oficinas centrales están en el campus de la Universidad de California (UCLA) en Los Ángeles. Esta está destinada a contribuir en la conservación y defensa de la tradición mexicana en Estados Unidos.
“El Fondo Los Tigres del Norte en UCLA está designado para el estudio, investigación, adquisición, preservación, difusión, y presentación de las tradiciones auténticas consagradas y musicales folklóricas en español. El fondo es el primero de su clase”, refiere su biografía disponible en internet.
“Ellos son capaces de contar en tres minutos lo que los demás necesitamos 400 páginas”, dijo el escritor y miembro de la Real Academia Española (RAE) Arturo Pérez-Reverte, respecto a Los Tigres del Norte en una feria del libro.
Del corrido “Contrabando y traición” nació una leyenda, “Camelia la texana”. En la historia, Camelia acompañaba a Emilio Varela en un carro que llevaba las llantas “repletas de hierba mala”. Este relato surgió de la imaginación del compositor Ángel González en 1972, dos años antes de ser parte de Los Tigres del Norte para su álbum homónimo.
En una entrevista, el también periodista español Pérez-Reverte afirmó que la inspiración para su decimotercera novela, La Reina del Sur, vino tras escuchar esta canción. El libro narra la vida de Teresa Mendoza. Es una joven mexicana, nacida en Sinaloa, quien se ve envuelta en las redes del contrabando y narcotráfico cuando viaja a España.
El corrido, que terminó en obra literaria, no fue su único acercamiento cultural. Luego de 30 años del Festival Internacional Cervantino (FIC), en 2002 Los Tigres del Norte se presentaron en el Foro “La Yerbabuena”, junto con Molotov, La Barranca y la solista Julieta Venegas. En ese evento donde participaron 2,700 artistas de los cinco continentes, fueron el primer grupo de música norteña invitado. Países como España, Canadá, Reino Unido, Suiza, Argentina, Japón, Francia, Hungría, Alemania y México son parte de los proyectos especiales.
A diferencia de los eventos o estaciones de radio donde su música terminaba censurada, en ese entonces, el director del FIC, Ramiro Osorio, no descartó que la banda de música mexicana interpretara sus conocidos “narcocorridos”. Pero dejó en claro que no era un espacio donde se iba a coartar la libertad de expresión. Menos cuando sus canciones reflejan la situación de un país en su ámbito político, económico y social.
López Obrador anunció que Los Tigres del Norte amenizarán el programa musical. Lo anterior, con motivo de las fiestas patrias del próximo 15 de septiembre, en el Zócalo de la Ciudad de México. A las 20:00 horas comenzará el sorteo de la Lotería Nacional, dos horas después, dará inicio la música con la participación del grupo norteño. Ellos abrirán el show antes y después del Grito de Independencia.
“Se abre la plaza el 15, fiesta para todos, y a las 8 de la noche es el sorteo del 15. A las 9, se abre la Plaza (de la Constitución) y a las 10 empieza la música. Estamos ahorrando porque la pobreza franciscana alcanza para que haya alegría, felicidad en nuestro pueblo, además es un día histórico. Van a estar con nosotros antes y después del Grito, van a actuar, a participar, Los Tigres del Norte”, adelantó este miércoles en su conferencia de prensa.
Además, en los festejos también estará Martin Luther King III, hijo del activista estadounidense homónimo que luchó por los derechos civiles sin violencia.
“Voy a invitar a familiares de luchadores sociales del mundo, bueno ya invité y así voy a invitar a otros, al hijo de Martin Luther King y a su familia. Son ejemplares, es una familia de lo mejor”, acotó.
Hoy Los Tigres del Norte lo conforman los hermanos Jorge, Hernán, Eduardo y Luis Hernández y su primo Óscar Lara. Hace pocos meses presentaron su más reciente material musical, un disco con 12 canciones titulado La reunión. A diferencia de varias agrupaciones mexicanas que presumen una duración de varias décadas, los apodados Jefes de Jefes, tras 54 años de carrera, se mantienen en el ámbito musical siempre con canciones nuevas y vigentes. N
