La producción de energía renovable en el mundo creció un 9.1 por ciento en 2021, en particular en Asia. Mientras que América Central y el Caribe apenas aumentó un 3.3 por ciento, según un informe de la Agencia Internacional para las Energías Renovables (IRENA).
Aunque la energía hidroeléctrica representó la mayor parte de la capacidad total mundial de generación renovable con 1 230 GW, las Estadísticas de Capacidad Renovable 2022 de IRENA muestran que la energía solar y la eólica siguieron dominando la nueva capacidad de generación.
En conjunto, ambas tecnologías contribuyeron un 88 por ciento a la proporción de toda la nueva capacidad renovable en 2021. La capacidad solar lideró con un aumento del 19 por ciento, seguida de la energía eólica, que aumentó su capacidad de generación en un 13 por ciento.
“Este progreso continuo es otro testimonio de la resiliencia de la energía renovable. Su sólido rendimiento el año pasado representa más oportunidades para que los países obtengan los múltiples beneficios socioeconómicos de las energías renovables.
“Sin embargo, a pesar de la alentadora tendencia mundial, nuestras nuevas Perspectivas Mundiales de Transiciones Energéticas muestran que la transición energética está lejos de ser lo suficientemente rápida o generalizada como para evitar las terribles consecuencias del cambio climático”, dice el Director General de IRENA, Francesco La Camera.
“Nuestra actual crisis energética también se suma a la evidencia de que el mundo ya no puede depender de los combustibles fósiles para satisfacer su demanda de energía. El dinero dirigido a las centrales eléctricas de combustibles fósiles produce resultados poco premiados, tanto para la supervivencia de una nación como del planeta.
“La energía renovable debería convertirse en la norma en todo el mundo. Debemos movilizar la voluntad política para acelerar el camino de 1,5 °C”.
Para alcanzar los objetivos climáticos, las energías renovables deben crecer a un ritmo más rápido que la demanda de energía. Sin embargo, muchos países aún no han llegado a este punto, a pesar de aumentar significativamente el uso de energías renovables para la generación de electricidad.
El sesenta por ciento de la nueva capacidad en 2021 se añadió en Asia, lo que resultó en un total de 1,46 teravatios (TW) de capacidad renovable para 2021.
China fue el mayor contribuyente, añadiendo 121 GW a la nueva capacidad del continente. Europa y América del Norte, liderados por Estados Unidos, ocuparon el segundo y tercer lugar respectivamente, con el primero añadiendo 39 GW y el segundo 38 GW.
La capacidad de energía renovable creció un 3,9 por ciento en África y un 3,3 por ciento en América Central y el Caribe. A pesar de representar un crecimiento constante, el ritmo en ambas regiones es mucho más lento que el promedio mundial. Esto que indica la necesidad de una cooperación internacional más fuerte para optimizar los mercados de electricidad e impulsar inversiones masivas en esas regiones. N
