Hidalgo se convierte en la tercera entidad del país en despenalizar el aborto. Hasta este miércoles, la interrupción legal del embarazo solo estaba despenalizada en Ciudad de México, que la aprobó en 2007, y en el estado Oaxaca (sur), desde 2019.
“¡Bravo, Hidalgo! Un estado más a favor de la libertad y la justicia para las mujeres”, publicó la oenegé GIRE, a favor del derecho al aborto legal, en la misma red social.
Decenas de mujeres pertenecientes a colectivos feministas, concentradas en los exteriores del Congreso de Hidalgo, celebraron el resultado de la votación con abrazos, risas y gritos, según mostró la televisión local.
El dictamen también contempla que el proceso para interrumpir sea gratuito y será competencia de las autoridades locales de salud prestar y supervisar e servicio.
Si el procedimiento se realiza después de las 12 semanas de embarazo, se castigará con una pena de seis meses a un año de prisión.
El aborto forzado, es decir, obligar a una mujer a interrumpir la gestación sin su consentimiento, merecerá una pena de 3 a 7 años de prisión. En caso de violencia, la prisión será de 9 años.
A pesar de que una comitiva de activistas autodenominados “provida” ingresaron al recinto para interrumpir la sesión de los legisladores que presentaron el dictamen, éste fue aprobado.
El aborto inseguro es la cuarta causa de muerte materna en México, donde mujeres continúan siendo criminalizadas por esta causa, según datos de GIRE.
México enfrenta además un serie problemática de violencia de género, con 967 casos de feminicidio durante 2020 y una impunidad del 94% de los delitos contra las mujeres, según cifras oficiales.
