Actualmente, el aborto está prohibido en Gibraltar y penado con prisión de por vida, aunque tal sanción no ha sido aplicada en tiempos modernos. Únicamente se permite cuando la vida de la madre está en riesgo.
Del referendum resultó que 62 por ciento de los votantes aprobaron una enmienda que permite el aborto cuando la salud física o mental de la mujer está en riesgo, como en caso de violación o incesto, o cuando el feto presenta defectos físicos que puedan ser fatales.
Poco más del 36 por ciento votó contra la medida en la consulta, que expuso las opiniones divididas en este enclave británico en el extremo sur de España, con una población de 32.000 habitantes. El referéndum tuvo una participación de 52.75 por ciento.
Hasta ahora, las mujeres de Gibraltar que quieren someterse a un aborto deben viajar a España o Gran Bretaña para el tratamiento. La enmienda permitirá que la mujer se someta a un aborto hasta las 12 semanas del embarazo si existe riesgo para su salud física o mental, o más tarde si se determina que el daño sería grave y permanente.
Aunque los cambios fueron aprobados por el parlamento de Gibraltar, el referéndum consultó a los votantes si la enmienda debe entrar en vigor. Aunque no se dio a conocer un plazo específico, la enmienda debe entrar en vigor rápidamente, por lo que activistas contra el aborto lamentaron el resultado al considerar que desprotege a los fetos.
Karenza Morillo, quien hizo campaña por el “No” en el referéndum, declaró a la prensa local que “esta ley es muy extrema”, pues elimina toda la protección para los niños no nacidos.
El jefe del gobierno local, Fabian Picardo, quien hizo campaña a favor de la reforma, reconoció que el aborto es “un tema emocional”, pero destacó el resultado como un paso adelante. “Lo que queríamos hacer es asegurar que el mecanismo existiera (…) para que las mujeres pudieran decidir”, comentó a la televisora local, mientras activistas en favor al derecho a decidir sobre el cuerpo celebraban atrás de él. N
