Con la jornada trágica de este fin de semana, en la que se consumaron siete suicidios en Aguascalientes, se superó el récord máximo en la entidad.
De acuerdo al director de Salud Mental y Adicciones del Instituto de Servicios de Salud del Estado, Francisco Javier Pedroza Cabrera, en lo que va de del año se han registrado 178 suicidios, lo que superó la cantidad que se registró en 2019, que fue de 174. Previamente, en 2018 se contabilizaron 143 suicidios y 151 en 2017.
“El suicidio es tan atípico que puede haber semanas sin que se presente uno sólo, y otros días como este fin de semana, con siete, nueve suicidios, sí se ha presentado así en otras situaciones, además de que ahora en temporada decembrina es una época complicada, porque normalmente se duplica la tasa por suicidio en comparación de otros meses del año; ahorita tenemos registradas 178 muertes por suicidio y el año pasado tuvimos 174, es decir que ya estamos por arriba de las cifras que tuvimos el año pasado, es el pico más alto que hemos tenido en relación a los suicidios”.
En este sentido, señaló que la pandemia del Covid-19 ha jugado un papel preponderante como detonante de dicha problemática social, pues el confinamiento y la crisis económica vinieron a afectar la salud mental de las personas que ya habían presentado cuadros de depresión, ansiedad y conductas presuicidas.
“La incertidumbre que la propia pandemia ha ocasionado, el miedo al contagio, todo eso vino a vulnerar la salud mental, si va a haber vacuna o no; el confinamiento vino a modificar nuestras formas de vida, al estar conviviendo las 24 horas con nuestros seres queridos, que no estábamos tan acostumbrados a eso, había una dinámica diferente a la del confinamiento y eso agravó los problemas de interacción social”.
Sin embargo, si se consideran las expectativas que la Organización Mundial de la Salud (OMS) tenía sobre las afectaciones a la salud mental de las personas por los efectos de la pandemia, se podría decir que las cifras finales no han sido tan malas como se esperaban al inicio de la contingencia sanitaria, afirmó Pedroza Cabrera.
“Al inicio de la pandemia la OMS nos alertó desde el principio que el coronavirus no era solamente una situación de salud física, sino también que se vería vulnerable la salud mental, y es lo que estamos observando, los efectos de la pandemia, del confinamiento, de las clases virtuales, de la pérdida del poder adquisitivo en muchas familias, la situación económica, ya se están viendo los efectos en la salud mental de nuestra población”.
Añadió que las llamadas a los centros de atención psicológica del ISSEA se han incrementado hasta en un 30% a partir de marzo, cuando comenzó la pandemia de Covid-19 en Aguascalientes.
“Investigaciones de la UNAM nos señalan que personas que tenían alguna depresión, el confinamiento y el coronavirus les vino a potencializar hasta ocho veces más la posibilidad de manifestar problemas de salud mental, de depresión así como el consumo de sustancias nocivas y por supuesto el riesgo suicida; con nosotros se incrementó de la fase 1 a la fase 2 hasta en un 30% las llamadas por estos motivos”.
Estrategias atoradas por la pandemia
El director de Salud Mental y Adicciones señaló que durante los picos más álgidos de la pandemia, en donde se ha llamado a un periodo más estricto de confinamiento, se ha modificado la forma de atención personalizada para los pacientes, a través de terapias en vía telefónica, mientras que otras estrategias presenciales han tenido que pausarse y reanudarse conforme las condiciones sanitarias lo han permitido.
Entre estas últimas se encuentran los tamizajes y recorridos comunitarios a colonias y regiones con alta incidencia de suicidios, a fin de focalizar la atención psicológica a los grupos de mayor vulnerabilidad y marginación, y que muchas veces no acuden a recibir la atención que requieren.
Al respecto, indicó que la meta proyectada para el año 2020 era tamizar a 400 mil personas del oriente del municipio de Aguascalientes, pero debido a la pandemia del Covid-19 sólo se logró hacer un levantamiento a la cuarta parte, esperando que el resto puedan ser evaluados en la primera mitad del año.
“No terminamos la estrategia de los barridos comunitarios, nosotros proyectábamos tener tamizada toda la parte oriente de la ciudad, que es donde tenemos los problemas más graves de salud mental y adicciones, pero no se logró esto, tuvimos un tamizaje de alrededor de 100 mil personas, de un total de 400 mil que esperábamos tamizar, entonces necesitamos fortalecer nuestra área de salud mental comunitaria e identificar de forma oportuna los problemas de salud mental”, subrayó.
Actualmente, el personal del ISSEA cuenta con 130 psicólogos capacitados para brindar atención especializada a personas con tendencias presuicidas y depresión, esperan que en 2021 se puedan optimizar los recursos para obtener mayores resultados.
De acuerdo al presupuesto estatal 2021, aprobado por el Congreso local en la última sesión, el Centro Comunitario de Salud Mental Agua Clara contará con un presupuesto de 15 millones 583 mil pesos, cantidad que se mantiene fija desde el año 2018.
Finalmente, el galeno recordó las líneas de atención psicológica que brindan el servicio las 24 horas del día, los 365 días de la semana, que son:
