El grupo yihadista Estado Islámico (EI) afirmó el jueves que provocó la colisión entre dos helicópteros franceses que acabó con la vida de 13 soldados en Malí.
Los dos helicópteros militares franceses colisionaron el lunes durante una operación nocturna contra yihadistas en el sur de Malí.
La versión oficial francesa es que los aparatos apoyaban a comandos paracaidistas que mantenían un enfrentamiento armado con yihadistas en un sector donde la fuerza antiyihadista francesa Barkhane lleva regularmente a cabo operaciones contra grupos armados, entre ellos el Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS).
En un comunicado publicado en sus canales Telegram habituales, el EI afirmó que había tendido una emboscada a un grupo de soldados franceses en la región de Ménaka, y que estallaron los choques armados.
Un helicóptero que transportaba refuerzos para ayudar a las tropas sobre el terreno intentó aterrizar en el lugar de la emboscada, pero “los soldados del califato dispararon contra el aparato, obligándolo a retirarse, hasta que al final entró en colisión con otro helicóptero, causando la muerte de 13 soldados”, indicó el comunicado.
Se trata de una de las mayores pérdidas para las fuerzas militares francesas desde el ataque de 1983 contra el edificio Drakkar en Beirut, en el que murieron 58 paracaidistas franceses, y de la peor desde el inicio del despliegue de tropas francesas en el Sahel en 2013.
