A más de ocho años de los atentados ocurridos en contra de varias familias en el municipio de Allende por parte de Los Zetas, el poder ejecutivo federal, estatal y municipal pidieron disculpas a los familiares de las personas que fueron víctimas en este crimen.
El acto estuvo encabezado por el gobernador de la entidad, Miguel Ángel Riquelme, quien estuvo acompañado por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quienes hablaron con varios representantes de la sociedad civil y organizaciones como Alas de Esperanza de Allende, Familias Unidas en la Búsqueda y Localización de Personas Desaparecidas de Piedras Negras, Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila y en México, Grupo V.I.D.A. Laguna, Víctimas por sus Derechos en Acción, Asociación Internacional de Búsqueda de Desaparecidos, Voz que Clama Justicia por Personas Desaparecidas y Buscando Desaparecidos en México (BUSCAME).
El Gobernador de #Coahuila, @mrikelme, y la Secretaria de Gobernación, @M_OlgaSCordero, encabezaron la ceremonia de disculpa pública a familiares de personas desaparecidas en el Municipio de #Allende, por hechos ocurridos en marzo de 2011. pic.twitter.com/3aVXPlgeII
— Gobierno de Coahuila (@GobDeCoahuila) June 27, 2019
Los funcionarios presentes expresaron su solidaridad con las familias de las víctimas que fueron desaparecidas entre el 18 y el 20 de marzo del año 2011 en el municipio de Allende y en comunidades cercanas a la localidad.
Miguel Ángel Riquelme señaló que estos hechos “llenan de indignación, dolor e injusticia” al gobierno local. Por su parte, la secretaria Olga Sánchez Cordero indicó en este acto, a nombre del gobierno federal, que no se trata de un acto protocolario, sino una convicción personal e institucional, ya que es una prioridad. Agregó también que las autoridades de alto nivel supieron sobre los atentados en el momento, sin embargo, no actuaron para ayudar a la población.
El gobernador agregó que La disculpa pública de hoy no significa ni perdón ni olvido, sino el deber del estado de reconocer las violaciones graves que se cometieron por estos hechos, pero también el compromiso de enfrentar con las familias los deberes incumplidos de búsqueda.
No obstante, durante el acto, los familiares de las víctimas señalaron que esta petición de perdón se desvanece ante la falta de respuesta de los integrantes del gobierno local en el momento de la agresión, ya que se registraron alrededor de mil 400 llamadas al número de emergencia local que no tuvieron respuesta.
Esta petición de disculpas se realizó tras una recomendación lanzada por la Comisión Nacional de los derechos Humanos (CNDH), quien consideró que este acto fue realizado en complicidad con las autoridades.
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