Llega febrero, el “mes del amor”, y se abre una oportunidad para hablar sobre los derechos sexuales y reproductivos, sobre todo de los más jóvenes, quienes son los más vulnerables frente al embarazo adolescente y las infecciones de transmisión sexual
En Coahuila está prohibido desde septiembre de 2015 que niñas, niños o adolescentes menores de 18 años contraigan matrimonio. Esta medida está encaminada a la protección de los derechos de niñas y niños, aunque cabe señalar que, en su mayoría, las personas menores de edad que se casan en nuestro país son mujeres.
En 2015, año en que se prohibió el matrimonio infantil en el estado, un total de 18 mujeres menores de 15 años se casaron, mientras que, otras mil 266 tenían entre 15 y 17 años.
Un año después de esta prohibición (en 2016), contrajeron matrimonio siete adolescentes de 17 años y dos que tenían 16 años. También en 2017 se registró el matrimonio una mujer de 17 años.
Aunque a nivel nacional en la mayoría de las entidades federativas el matrimonio infantil está prohibido, aún es un problema de gran relevancia, ya que en 2017 un total de 2 mil 374 mujeres menores de edad se casaron.
Guerrero ocupó el primer lugar, ya que en esta entidad, en total mil 057 menores de edad del sexo femenino se casaron. Le sigue el estado de Chihuahua, con 514 registros de este tipo; Sonora, con 326; Tabasco, con 186, y Guanajuato, con 105 casos.
Aunque el número de casos donde la contrayente es menor de edad pasó de 29 mil 912 en 2014 a 9 mil 871 para 2016, la unión de personas adultas con menores de edad sigue siendo un reto de dimensiones mayúsculas para el país.
Cabe destacar que en Coahuila el cambio ha sido significativo desde que entró en vigor la reforma que prohibió el matrimonio infantil, aunque los riesgos para niñas, niños y adolescentes persisten.
De acuerdo con las estimaciones de CONAPO, nuestra entidad tiene el mayor número de adolescentes con hijos.
Por cada mil mujeres coahuilenses que tienen entre 15 y 19 años, se registraron 113 nacimientos. Esta cifra es la más alta del país y se encuentra por arriba de la que presentó Nayarit y Zacatecas, que registraron 112 y 105 nacimientos por cada mil mujeres en ese rango de edad.
En contraste, la Ciudad de México cuenta con 52 nacimientos por cada 100 mil adolescentes en ese mismo rango de edad: la cifra de Coahuila es superior por más de dos veces.
En nuestra entidad, el 20.8% de los nacimientos que se registraron durante 2017 fueron de madres adolescentes. Si se compara con el registro de 2012, de 23.1%, este indicador decreció 2.3 puntos porcentuales.
A pesar de que esta proporción ha disminuido durante los últimos seis años, aún es una situación preocupante.
Las cifras de natalidad del Inegi refieren que en 2017 se registró un total de 5 mil 497 nacimientos donde las madres eran mujeres coahuilenses menores de edad.
Las cifras son aterradoras: en tres nacimientos las madres tenían 10 años, en 4 nacimientos las madres tenían 12 años y en 44 casos su edad era de 13 años.
En suma, mil 172 nacimientos correspondieron a madres que en 2017 tenían 15 años o menos.
Estas cifras evidencian que las acciones que se han llevado a cabo en Coahuila no ha sido suficientes para inhibir este fenómeno, que amenaza el desarrollo integral de la juventud de nuestro estado.
Los contagios de infecciones y enfermedades de trasmisión sexual representan un problema de salud pública en todo el país.
De acuerdo con los anuarios de morbilidad de la Secretaría de Salud, durante 2017 en nuestro estado se registraron mil 686 casos de candidiasis urogenital. Esta infección es la de mayor frecuencia en nuestro estado.
De igual forma, la tricomoniasis urogenital, que en 2017 registró un total de 640 casos, es la segunda infección de transmisión sexual más frecuente.
Destaca que, en Coahuila, los casos registrados en 2017 de cinco infecciones de transmisión sexual presentaron incrementos significativos.
El chancro blando pasó de registrar solo un caso en 2016, a nueve casos en 2017; la infección gonocócica ha mantenido un incremento altamente significativo durante los últimos tres años: en 2015 se registraron 14 casos, para 2016 incrementó a 25 y en 2017 se registraron 136 casos, es decir, un incremento del 444 por ciento.
Otra infección que tuvo un fuerte incremento es el herpes genital. Durante 2015 se registraron 30 nuevos casos de esta infección, mientras que, en 2016 se registraron 36 casos. Sin embargo, al cierre de 2017 se registraron 72 casos más, con lo cual durante este año se acumuló un total de 108 nuevos casos, lo cual representa un incremento del 200 por ciento.
Por su parte, la infección asintomática por VIH presentó un incremento significativo en 2017 cuando se registraron 105 casos, ya que, comparado con los 77 casos que se registraron en 2016, equivalente a un incremento del 36 por ciento.
Destaca que, los casos registrado de SIDA se redujeron un 6% en 2017, cuando se registraron 34 casos, comparados con los 36 nuevos casos de 2016.
En este repunte del contagio de infecciones de trasmisión sexual en el estado, también se observa que los casos de sífilis adquirida han incrementado desde 2015, año en que se registraron 41 casos, pues para 2016 se registró un incremento del 27%, al registrarse 52 casos, y durante 2017 los casos de sífilis adquirida aumentaron a 61, lo que representó un incremento del 17 por ciento.
Si bien a nivel nacional también se han registrado más casos de estas infecciones, los incrementos en Coahuila se encuentran muy por arriba del agregado de todo el país.
Para 2017 en Coahuila los casos de infección gonocóica y de herpes genital incrementaron 444% y 200%, mientras que a nivel nacional los incrementos de estas infecciones fueron de 145% y de 49%, respectivamente.
De igual forma, la infección asintomática por VIH en el ámbito nacional incrementó un 11%, comparado con el incremento del 36% que se observó en nuestro estado.
El boletín epidemiológico de la Secretaría de Salud correspondiente a la semana 51 contiene el número de casos confirmados y de casos probables de enfermedades e infecciones acumulados durante 2018 hasta el 22 de diciembre. En él se puede ver también cómo estas cinco infecciones incrementaron durante el año pasado.
Destaca el caso de la sífilis adquirida, de la cual, como ya se mencionó, se reportaron 61 casos en 2017 en el anuario de morbilidad, mientras que en el boletín epidemiológico de la penúltima semana de 2018 se reportaron 109 nuevos casos acumulados de esta enfermedad durante ese año, los cuales representan el 2% de los 5 mil 640 que se registraron a nivel nacional.
En el caso del SIDA cabe mencionar que, mientras que en 2017 se registraron 105 nuevos casos, hasta el 22 de diciembre (incluidos los casos probables) ya sumaban 140 casos.
De acuerdo con el mencionado boletín epidemiológico, en nuestro estado se concentró el 6% de los casos registrados a nivel nacional de sífilis congénita, con 17 de los 300 casos totales.
El linfogranuloma venéreo también destaca por su alta relevancia en nuestro estado, ya que durante el año pasado se registraron 13 casos de los 224 que la Secretaría de Salud documentó a nivel nacional, el 6% del total nacional.
La población joven se muestra como la más vulnerable frente a los contagios de infecciones de transmisión sexual.
En Coahuila la población que tiene 19 años y menos representó el 14% de los nuevos casos de infecciones de transmisión sexual que se documentaron en 2017.
Este porcentaje incrementa drásticamente entre la población que tiene entre 20 y 24 años, ya que, en este grupo de edad se concentró el 19% de los nuevos casos que se documentaron durante el mismo año.
La infección más recurrente entre la población que tiene 19 años y menos es la candidiasis urogenital, seguida de la infección gonocócica.
De igual forma, entre la población de quienes tienen entre 20 y 24 años la enfermedad más frecuente también es la candidiasis urogenital, seguido de la tricomoniasis urogenital.
La Organización Panamericana de la Salud y la Secretaría de Salud de nuestro país afirman que el mejor método para evitar estas situaciones es el correcto uso del condón.
Los riesgos en materia sexual y reproductiva son numerosos entre la población joven: el embarazo adolescente es un problema en el que Coahuila ocupa el primer lugar nacional, mientras que, la población joven está más expuesta a los contagios de infecciones de transmisión sexual que, en nuestro estado, incrementan proporcionalmente más que en el resto del país.
Esta situación evidencia la necesidad de reforzar la política pública que se lleva a cabo en materia de educación reproductiva y de salud sexual. Si bien la prohibición del matrimonio infantil es una medida que contribuye a la garantía de los derechos humanos de las niñas y los niños, es apenas un paso frente a un largo camino que se tiene por recorrer.
