
El presidente Javier Milei ha cambiado radicalmente su discurso sobre el peso argentino. A finales de 2023, afirmaba que la moneda nacional “no vale ni excremento” y promovía la dolarización como única solución. Sin embargo, más de un año después, el peso sigue en circulación, el Banco Central (BCRA) no ha sido cerrado, y la inflación ha bajado del 10 % al 3 % mensual.
El ministro de Economía, Luis Caputo, aplicó una política ortodoxa basada en cero emisión monetaria y restricción cambiaria. Esto ha reducido la cantidad de pesos en circulación y mantenido el dólar estable con un aumento controlado del 1 % mensual, acompañado de un cepo cambiario, según un reporte de El País.
Sin embargo, esta estrategia ha generado un efecto colateral: los precios en dólares se han disparado. Actualmente, Buenos Aires es una de las ciudades más caras de América Latina:
No es la primera vez que Argentina experimenta una apreciación del peso. El economista Juan Manuel Telechea señala tres episodios similares en el pasado:
En todos estos casos, el peso terminó devaluándose drásticamente. El economista Juan Carlos Hallack advierte que la política actual podría desequilibrar la balanza comercial y generar problemas de sostenibilidad económica.
Uno de los momentos más polémicos ocurrió cuando Domingo Cavallo, arquitecto de la Convertibilidad en los 90, advirtió que la actual revalorización del peso podría causar una crisis similar a la de 2001.
Milei respondió con dureza, calificándolo de “impresentable”, asegurando que su plan económico es “mucho más exitoso que la Convertibilidad” y expulsando a su hija, Sonia Cavallo, de su puesto en la Organización de Estados Americanos (OEA). “Naturalmente, bajo el actual modelo no hay déficit fiscal, por lo que por ello no es necesario emitir para financiar al Tesoro, la inflación es decreciente y las reservas han aumentado”, escribió en una columna el presidente argentino en el diario La Nación.
Para el mandatario la cuestión de fondo es convencer a los inversores de que en la Argentina no habrá una devaluación.
Milei confía en que la entrada de capitales extranjeros estabilizará la economía y espera que el FMI le otorgue 12,000 millones de dólares para reforzar las reservas del BCRA. Mientras tanto, los argentinos buscan refugio en compras online en el extranjero y viajes a Brasil, Uruguay o Chile para evitar los altos precios locales.
¿Será sostenible la política económica de Milei o enfrentará Argentina una nueva crisis cambiaria? N