“Fue desde el sexenio pasado que los presupuestos para obra pública se fueron reduciendo pronunciadamente cada año, afectando así a los estados del Norte principalmente”, señaló Francisco Salazar Mendía, Presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Durango.

Resaltó que anteriormente Durango tenía acceso a presupuestos que llegaban a los mil 500 millones de pesos, y debido a las reducciones de la administración anterior, estos fondos cayeron a 350 millones de pesos, lo cual ya no fue suficiente, agregó.

El empresario https://cmicdurango.com/ explicó que fue muy notable la falta de apoyo a dependencias estatales como la CAED y la SECOPE, las cuales no tuvieron el mismo acceso a participaciones como en administraciones federales pasadas, y por lo tanto se redujo el número de empresas contratadas.
En ese sentido, la situación para las empresas locales que dependían del trabajo que ofrecían las instancias estatales generó problemas a los empresarios, registrando así el cierre de al menos 25 negocios locales en los últimos dos años.

“En el presente año se han venido arrastrando las situaciones difíciles para apoyar a empresas, por lo que vemos que el cierre de negocios deriva del poco presupuesto que llega a la entidad Duranguense”, explicó Francisco Salazar

Se espera que para el cierre del año la situación del gremio de los constructores pueda reflejar un repunte en actividades, y con el apoyo de la federación puedan llegar más apoyos para tener o bien garantizar obra pública en el estado.

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