En lo que va del 2024, en Durango un total de 11 personas han fallecido por ahogamiento en cuerpos de agua como arroyos, presas y albercas. De acuerdo con la información de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) nueve de los fallecidos por sumersión perecieron en arroyos y canales, siendo el caso más reciente el de la familia en el municipio de Santa María del Oro donde el padre, madre y una bebé de 9 meses perdieron la vida.

El titular de la CEPC, Arturo Galindo Cabada, hizo énfasis en la importancia de no introducirse a nadar en cuerpos de agua donde se desconoce la profundidad y condiciones del terreno. Asimismo, ante la continuidad de lluvias en Durango, recordó el exhorto a no “intentar ganarle el paso al agua”, para evitar que sean arrastrados por la corriente.

Indicó que, en los casos de ahogamiento en albercas, han sido dos menores de edad, una niña en un balneario de Durango capital y un niño en una finca en la región Laguna.

Refirió que tanto las autoridades, como los propietarios de espacios con albercas y la misma ciudadanía que acude deben seguir trabajando para evitar estos accidentes. Galindo Cabada recordó que, hace unos días, se realizó un taller donde participaron corporaciones de Protección Civil y personal de balnearios para capacitarse en rescate acuático, además aprendieron sobre primeros auxilios.

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