La alimentación saludable es fundamental para la prevención de cualquier tipo de cáncer, incluyendo el de mama, el doctor Juan Carlos Espinoza Burciaga, coordinador auxiliar médico en salud pública del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), recomendó llevar una alimentación balanceada y alta en fibra, que incluya brócoli, acelgas, espinacas, setas, uva y papaya.
También sugirió disminuir el consumo de azúcares y grasas, practicar ejercicio al menos 30 minutos diarios, mantener peso adecuado, evitar el cigarro y el alcohol.
Pidió también, realizarse una autoexploración mamaria mensual a partir de los 20 años, de preferencia al quinto día de la menstruación y solicitar una mastografía a partir de los 25 años, en caso de antecedentes familiares de la enfermedad. Si no se tienen, se debe hacer cada dos años a partir de los 40 y cada año al llegar a los 69 años de edad.
Dijo que la alimentación es una parte importante para la prevención, aunque el cáncer es una enfermedad multifactorial, modificando la alimentación se puede prevenir.
Espinoza Burciaga comentó que la obesidad y el sobrepeso son causantes de 18 tipos de cánceres y que, de esos, la dieta influye en un 35%, para el desarrollo de cáncer de mama, cáncer de estómago y cáncer de colón.
Las verduras tienen muchas propiedades y compuestos biorgánicos que ayudan a combatir el cáncer, mencionó, por ello dijo el implementarlo como hábito de vida ayuda a la prevención de esta enfermedad, pero también a la par, evitar los factores de riesgo como el sedentarismo y la obesidad.
Entre los alimentos de riesgo se encuentran las carnes rojas, ocupan el lugar número 1 en alimentos con propiedades cancerígenas, exhortó a limitar su consumo.
Finalizó al decir que entre los factores de riesgo se encuentran: dietas altas en carnes rojas, oscurecimiento de las carnes al asarlas, dieta baja en verduras y frutas, consumo de alcohol y tabaco.
