Como parte de las celebraciones del Día de Muertos, la Ciudad de México se viste de naranja para recibirlas el 1 y 2 de noviembre. Para 2022 se cultivaron 5 millones de macetas de cempasúchil, cifra histórica tras cuatro años de la implementación del programa Altépetl Bienestar, una estrategia de gobierno que busca conservar, proteger, restaurar y mantener los ecosistemas del Suelo de Conservación mediante acciones comunitarias y la retribución por servicios socioambientales.
En contraste con la cifra de este año, en 2018 se produjeron 664,000 plantas de cempasúchil, en 2019 un total de 900,000 y, en 2021, el número ascendió a 3.5 millones de flores. Bajo el nombre de “Sin cempoalxóchitl no hay Mictlán”, la directora general de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr), Columba Jazmín López Gutiérrez, hizo un llamado a la población para adquirir esta planta originaria de México en la ruta agroturística y en los mercados de plantas Cuemanco, Cuemanquito, Palacio de la Flor, Flores Madre Selva y en el de Plantas San Luis Tlaxialtemalco, donde los visitantes la podrán obtener hasta el próximo 31 de octubre.
“Hoy la Ciudad de México también produce para vender. Somos grandes productores de cempasúchil, así como se comercializa en 20 estados de la república, también en la capital del país. Tenemos grandes variedades: la larga que se conoce como greña, la clemolito, que es la variedad criolla, y también está marvel II, es la flor naranja”, dijo en el banderazo de la nueva temporada realizado este miércoles 19 de octubre.
Desde la zona chinampera de San Gregorio Atlapulco, en la alcaldía Xochimilco, López Gutiérrez precisó que actualmente hay 8,300 beneficiarios del programa Altépetl Bienestar. Además, la producción de esta flor representa una fuente de trabajo para más de 5,000 familias que dependen directamente de la venta, en donde aprovechó para enunciar “¡Ayudemos a los productores del Suelo de Conservación!”.
Los interesados podrán recorrer a pie o en bicicleta las rutas agroturísticas del 19 al 31 de octubre en un horario de 09:00 a 18:00 horas. Un dato a destacar es que las plantas no son transgénicas, se trata de variedades híbridas, resultado del mejoramiento de especies nativas.
En contexto, desde el 2008 la celebración del Día de Muertos fue reconocida por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de México para toda la humanidad. Es una tradición que evoca la presencia de los seres queridos que ya fallecieron, igualmente está ligada al final del ciclo de la producción de maíz, cultivo más representativo de México.
El nombre de esta planta proviene del náhuatl “Cempohualxochitl”, que significa “flor de 20 pétalos”. Con información de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), en la época prehispánica los mexicas asimilaban el color amarillo con el sol y por ello, la utilizaban en altares, ofrendas y entierros dedicados a sus difuntos.
Esta icónica flor también se utiliza para obtener colorante natural para teñir objetos, prendas o alimentos. En la avicultura suele usarse para alimentar a las aves con el fin de que su piel y la yema de huevo aumenten su coloración. Asimismo, es la materia prima para elaborar cervezas artesanales, nieves o pulque.
Sin embargo, la variedad de semillas asiáticas está desplazando a las especies nativas de México en los comercios, lo que impacta en el campo y sus productores locales. Países como China, India y Perú han modificado las semillas en laboratorios a fin de aumentar el número de sus flores.
A través de redes sociales, la comunidad científica y biólogos han enlistado ciertas características para adquirir flores nativas. Como primer punto, el cempasúchil chino es conocido como Marigold, y aunque tiene un aspecto similar al mexicano, algunas diferencias son notables: la flor es más pequeña, normalmente se vende en macetas, su color es menos intenso, las semillas no germinan y no desprende el aroma característico de esta planta.
En cambio, el cempasúchil mexicano tiene un color llamativo en sus pétalos que varía entre el anaranjado y amarillo, tiene un tallo estriado y lanoso; su tamaño es mayor, puede llegar a medir 20 centímetros de largo y su venta común es en ramos. N
