ALREDEDOR de uno de cada 5 infectados con SARS-CoV-2 no desarrolla anticuerpos anti-N, según una investigación del King’s College London.
El estudio ZOE COVID de 8,193 personas previamente infectadas encontró que el 81 por ciento dio positivo para anticuerpos anti-N, derivados de infecciones naturales en lugar de vacunación, entre abril y agosto de 2021.
“La probabilidad de tener estos anticuerpos fue mayor si las personas tenían más síntomas y mostraban síntomas ‘clásicos’, como fiebre, tos persistente y anosmia.
“Las tasas también fueron más altas cuando las tasas de casos en la población fueron más altas cuando dieron positivo. Aquellos que tenían menos probabilidades de tener anticuerpos anti-N incluían aquellos con comorbilidades y fumadores”, informó el estudio.
Cuando se está infectado con el virus que causa covid-19, SAR-CoV-2, el sistema inmunológico responde de varias maneras diferentes.
Una respuesta importante es producir anticuerpos: estas son moléculas especiales en su cuerpo que reconocen el virus y ayudan a deshacerse de él, y proporcionan protección contra futuras infecciones.
Una forma de saber si alguien ha sido infectado con covid-19 es buscar la presencia de anticuerpos contra el virus en su sangre.Hay dos tipos de anticuerpos que podemos probar.
Las pruebas anti-N buscan anticuerpos que reconozcan una molécula dentro del virus SARS-CoV-2 llamada nucleocápside (N). Los anticuerpos anti-N solo se producen si realmente has sido infectado con covid-19 (infección natural).
Las pruebas anti-S buscan anticuerpos contra la proteína de espiga (S) en la superficie del virus; estos anticuerpos pueden estar presentes tanto después de una infección natural como de una vacuna. Esto se debe a que las vacunas covid se basan en la proteína de espiga.
“De los 8,193 contribuyentes que dieron positivo, 6,609 (80,67 por ciento) tuvieron un resultado positivo en la prueba de anticuerpos anti-N, por lo que tenían anticuerpos Anti-N.
“Si bien es una buena noticia que cuatro de cada cinco personas infectadas con covid-19 terminaran con anticuerpos protectores después, significa que una de cada cinco no lo hizo, y podrían estar en mayor riesgo de infectarse de nuevo”.
Los encargados del estudio señalan que la protección inducida por vacunas contra el covid-19 comienza a desvanecerse después de varios meses y en esta nueva investigación han encontrado que las personas todavía tenían anticuerpos anti-N al menos 9 meses después de la infección, “lo que sugiere que la protección a través de infecciones naturales podría ser más duradera que la inmunidad inducida por la vacuna”.
Sin embargo, “también hemos descubierto que la protección a través de la inmunidad natural es menos efectiva en general que la vacunación, por lo que siempre le recomendamos que se vacune tan pronto como sea elegible”, expresan. N
