
A lo largo del día decenas de extranjeros hacen cola a las puertas de las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) para resolver o a actualizar su situación jurídica en el país.
Con cubrebocas y a la distancia recomendada, esperan ser atendidos y acceder al interior de la institución, para realizar los trámites que les permitan su estadía legal en territorio mexicano.