
Antaño tabúes, los tatuajes se han introducido en la corriente principal como una forma de arte, un medio de expresión personal y permanente que se desnuda ante la mirada de los demás.
En The Tattoorialist, los autores Nicolas Brulez y Mylène Ebrard rinden homenaje a algunos de los mejores tatuadores del mundo.
Nueva York, Estados Unidos
El “Guernica” de Picasso es la pintura favorita de Banks, quien describe el tatuaje como “la forma artística o artesanal más misteriosa y poderosa que conoce el hombre”.
Londres, Inglaterra
La producción de este artista conceptual evoca la obra de Salvador Dalí y pone el surrealismo a flor de piel.
París, Francia
Misteriosa tatuadora de culto, Karenine se inspira en sus viajes y en las mujeres de todo el mundo para crear elaborados diseños.
Berlín, Alemania
La obra de Rehme, que “The Tattoorialist” describe como “tierna y angustiosa al mismo tiempo”, cobra vida en el establecimiento berlinés Noïa (previa cita).
Itoshima, Japón
Maestro del método del tatuaje Kyushu -técnica tradicional que utiliza un bastón y agujas-, Tsuyoshi se especializa en diseños del período Edo.
Tokio, Japón
Los tatuajes de Jiro están inspirados en la cultura tradicional japonesa, como los ukiyo-e (“imágenes del mundo flotante”), las pinturas y los grabados en madera del período Edo.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek