Leopoldo Eduardo Soto Cortez junto con Jesús Ernesto Zubía Salas, ex oficial de la Policía Municipal, así como los policías estatales Juan Ascención Chacón Araujo y David Efrén Ortega Díaz, fueron suspendidos de sus cargos e inhabilitados para ejercer el servicios público por abuso policíaco.
El 20 de septiembre de 2017, la Fiscalía General del Estado informó que culminaba el juicio oral contra los ex elementos policíacos por los hechos ocurridos el 11 de octubre de 2013, cuando causaron lesiones a un civil, al momento que se encontraban en servicio.
Aparte de inhabilitarlos para ejercer cargos dentro del servicio público, se sentenció a Soto y Ortega con dos años de prisión por el delito de Ejercicio Ilegal del Servicio Público, y de seis meses para Zubía y Chacón, por Abuso de Autoridad, penas que no se ajustaban a los hechos y no representaban un castigo ejemplar, por lo cual la Fiscalía indicó entonces que interpondría un recurso de casación.
Los hechos por los que fueron condenados, ocurrieron al detener a un hombre durante un operativo y de manera ilegal, lo golpearon y le causaron lesiones en varias partes del cuerpo, además de aplicarle descargas eléctricas en la espalda, con un artefacto conocido como “chicharra”.
A la luz de los hechos, la Fiscalía no interpuso el recurso de casación o no procedió, toda vez que el ex agente Leopoldo Soto se encontraba libre hasta hoy en la madrugada, que fue arrestado por violencia familiar en su domicilio de la colonia División del Norte II etapa, y murió por estrangulamiento en la Comandancia Sur.