El nacimiento de un bebé en una lancha, registrado este miércoles por la mañana en la presa Temascal de San Miguel Soyaltepec, región de la Cuenca de Oaxaca, es apenas la punta del iceberg de las condiciones de marginación que padecen los habitantes de la población mazateca “Corriente Ancha”.
A casi ocho décadas de la construcción de la presa “Miguel Alemán”, que obligó a miles de indígenas a abandonar sus tierras y a otros a permanecer en una resistencia silenciosa, aislados por el agua, la pobreza extrema mantiene al 29 por ciento de los 287 pobladores de la localidad en el analfabetismo, con un promedio de escolaridad de tres años, de acuerdo a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
La población está conformada por 57 viviendas que carecen en su totalidad de agua entubada, el 70 por ciento no cuenta con refrigerador, el 52 por ciento no tiene radio, el 60 por ciento tampoco posee una televisión y el 23 por ciento carece de energía eléctrica, según los reportes de la Sedesol.
Ninguna de las viviendas de esta agencia perteneciente a San Miguel Soyaltepec –colindante con Veracruz– tiene internet, ni sus habitantes cuentan con teléfono fijo o celular. Peor aún, para salir de la población se requiere viajar un trayecto de una hora y media en lancha.
El transporte únicamente otorga servicios dos veces al día y hay que esperar a que se ocupe para que pueda partir, informaron las autoridades sanitarias. Ante lo cual, la mujer que esta mañana dio a luz en la lancha, tuvo que aguantar los dolores de parto antes de partir de Corriente Ancha, puesto que un viaje especial le habría costado 800 pesos.
La localidad tiene una casa de salud y una asistente, por lo que, las personas que se encuentran enfermas o las mujeres embarazadas que requieren atención médica, deben acudir al hospital de San Miguel Soyaltepec, Temascal o al centro de salud de esa misma población, a una hora y media en lancha.
Alrededor de las 8:40 de la mañana, personal del hospital recibió la notificación que una mujer había dado a luz en una embarcación, mientras pretendía llegar al hospital, por lo que la médica Juana Blas acudió a otorgarle atención a la orilla de la presa, tras lo cual la paciente y su bebé fueron trasladadas en ambulancia al hospital para continuar con la atención.
La madre de cuatro hijos tiene 28 años y dio a luz a una niña de 2.350 kilogramos con una talla de 50 centímetros.
