El 3 de julio de 2020 recibí una llamada telefónica terrible. La llamada que ningún progenitor jamás espera recibir. La llamada que cambió mi vida para siempre. Aquella mañana había enviado un mensaje de texto a mi hijo, Jack, preguntándole cuándo volvería a casa tras visitar a un amigo. Nunca recibí respuesta. Empecé a trabajar … Leer más
El 3 de julio de 2020 recibí una llamada telefónica terrible. La llamada que ningún progenitor jamás espera recibir. La llamada que cambió mi vida para siempre. Aquella mañana había enviado un mensaje de texto a mi hijo, Jack, preguntándole cuándo volvería a casa tras visitar a un amigo. Nunca recibí respuesta. Empecé a trabajar … Leer más